BROWNSVILLE, ESTADOS UNIDOS.-Sumido en un profundo dolor y consternado por lo que está viviendo, Gabriel contó cómo dejó a su familia en Venezuela para cambiarles la vida con la ayuda económica que él les enviaría desde Estados Unidos, sin embargo, ahora ese sueño se ha truncado.
“Yo aquí llegué con un sueño de darle un mejor futuro a mis hijos”, dijo a Telemundo el venezolano que es uno de los 11 sobrevivientes del brutal atropellamiento que se registró la mañana del domingo en Brownsville, Texas.
Según narró Gabriel, la tragedia ocurrió cuando acababa de salir del centro de migrantes donde permanecía detenido.
“Ahora resulta que no tengo pierna, todos mis sueños se han roto, se han ido”, dijo entre lágrimas el venezolano.
Su familia, por otro lado, pidió al presidente Joe Biden que los ayuden a viajar para verlo. “Mis hijos y yo necesitamos ver a su papá”, mencionó la esposa en un video compartido por el medio estadounidense.
Gabriel sigue interno en un centro asistencial de Brownsville, a la espera de que su pierna sane completamente para poder salir.
Presentan cargos contra hombre que atropelló a migrantes
George Álvarez, de 34 años, se saltó un semáforo en rojo y perdió el control de su automóvil el domingo, atropellando a un grupo de personas que esperaba en una parada de autobús frente a un centro de acogida de migrantes, explicó el jefe del Departamento de Policía de Brownsville, Félix Sauceda.
El incidente dejó al menos ocho muertos, todos ellos hombres, detalló el oficial, y 10 heridos, algunos en estado crítico.
El jefe policial indicó que las autoridades aún esperaban un informe toxicológico sobre Álvarez, y no descartaban ningún motivo para el incidente.
“George Álvarez es un residente de Brownsville con una extensa hoja de antecedentes penales”, dijo al exhibir la lista de cargos previos del detenido que incluyen asalto, robo y conducir en estado de ebriedad.
Las autoridades consideraron inicialmente el incidente como accidental, aunque un testigo declaró a la AFP que el conductor había gritado insultos al grupo antes de acelerar.
Varios de los fallecidos eran migrantes y se trabaja con funcionarios de la Patrulla Fronteriza para verificar sus ingresos a Estados Unidos.
Después del choque, el automovilista intentó huir pero fue retenido por personas en el lugar hasta que llegó la policía, según Sauceda.
Además de los ocho cargos de homicidio involuntario, Álvarez fue acusado de 10 cargos de asalto agravado con un arma mortal: su vehículo.