Un tiroteo se registró la madrugada del lunes durante un festival de música electrónica en la turística Playa del Carmen, en el este de México, dejando cinco muertos -entre ellos dos canadienses, un italiano y un colombiano- informaron autoridades que dieron cuenta de 15 lesionados.
Aparentemente, una persona abrió fuego mientras dos agentes internos de seguridad repelieron el ataque con disparos, provocando una estampida en la discoteca Blue Parrot durante el festival BPM, informó en conferencia de prensa Miguel Ángel Pech, fiscal del estado de Quintana Roo -al que pertenece Playa del Carmen-.
Según Pech, al llegar al lugar de los hechos las autoridades encontraron cuatro cuerpos sin vida, mientras que una persona más murió en el hospital en que era atendida.
Entre los muertos, 'dos son de Canadá, otro es de Italia y uno al parecer es colombiano', puntualizó el funcionario, al explicar que todos ellos portaban vestimenta del festival musical.
'Concluimos que uno de ellos era supervisor de seguridad de BPM y los demás también tenían ropa que los distinguía como parte del staff' del evento, aseguró.
Los organizadores del evento habían confirmado más temprano que al menos tres de los muertos formaban parte de su equipo de seguridad.
El gobierno estatal dijo en un comunicado que los cuatro varones murieron por heridas de bala.
Además de estos cuatro extranjeros, falleció una mujer tras sufrir 'un dislocamiento en la estampida que se produjo tras la balacera', dijo Pech, quien precisó que de las 15 personas lesionadas, cinco ya fueron dadas de alta.
Según las autoridades, cuatro personas fueron detenidas y se investiga si tienen relación con este caso.
Aunque Pech pidió 'secrecía' en las investigaciones para no entorpecerlas, Rodolfo del Ángel, secretario de Seguridad Pública del estado Quintana Roo, dijo a Milenio televisión que la primera línea de investigación 'es la riña entre particulares por algún problema que se suscitó al interior' de la discoteca.
'Gente en pánico'
En las redes sociales empezaron a circular fotografías y videos de testigos del tiroteo ocurrido en Playa del Carmen, a unos 68 km al sur del turístico balneario de Cancún.
Esta región del Caribe, cuyas aguas son de color turquesa y es predilecta de turistas estadounidenses, canadienses y europeos, no suele registrar actos violentos ligados al narcotráfico como ocurre en otras zonas del país.
Pero el pánico se apoderó de los asistentes al festival musical, quienes vivieron escenas caóticas con decenas de personas gritando y corriendo en todas direcciones.
'Tuvimos que volar por la barda, la protección de metal, porque estaban disparando. Fue horrible porque estábamos súper asustados' dijo a la AFP Eric Álvarez, un DJ mexicano de 40 años, frente al bar cuya fachada está decorada con un perico color azul.
'Había mucha gente en pánico', explicó este hombre que perdió sus prótesis dentales, su celular y su cartera.
'Cuerpos en el piso'
Aunque según las autoridades los disparos habrían podido comenzar dentro de la discoteca, otras fuentes aseguran que ocurrieron fuera del club.
En un comunicado oficial publicado en Facebook, BPM Festival lamentó el 'acto de violencia sin sentido' que se 'inició en Calle 12 frente al club'.
De su lado, una editora de la revista musical Mixmag, con sede en Londres, presenció la balacera tras las bambalinas del Blue Parrot y, según ella, al menos cuatro o cinco disparos se escucharon hacia las 02H45 (07H45 GMT) frente al club.
'La gente empezó a correr porque hay una salida en la parte trasera. Nosotros nos detuvimos y nos escondimos detrás de un muro de cemento y luego nos refugiamos bajo una mesa de metal', asegura Valerie Lee, editora en Estados Unidos de Mixmag digital, citada en la revista.
'En un principio, los guardias de seguridad no pensaron que eran disparos y decían que se trataba de fuegos artificiales, asegurando que todo estaba bien. Luego, las personas seguían corriendo y decían que habían visto una pistola. Nosotros seguimos escondiéndonos hasta que abrieron las puertas traseras y corrimos hacia afuera', dijo Lee.
Agregó que afuera del recinto, sus amigos se encontraban a solo seis metros de una persona que disparó.
Había 'cuerpos en el piso. No parece que los atacantes intentaron entrar a la fiesta', escribió Lee, al precisar que la policía tardó más de 10 minutos en llegar.
