Muy bien profesor Eulogio Chávez, denuncie los actos de corrupción que sean de su conocimiento como esa maestra que cobraba por “trabajar” al mismo tiempo en Tegucigalpa y en Danlí.
Claro que ahora lo hace porque él mismo ya no puede seguir cobrando sin trabajar; pero no importa, siempre es una ayuda al país, aunque no sea por patriotismo sino por envidia.