La ministra de Salud, Carla Paredes, confirmó que Honduras investiga dos casos sospechosos de metapneumovirus humano (HMPV), uno de los varios virus que mantienen colapsados los hospitales de China, y que, a su vez, revive el fantasma de la pandemia de covid-19, que tuvo su origen en ese país asiático.
Ante el temor que genera la posibilidad de una nueva pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha corrido a informar que los virus detectados recientemente en el norte de China “son conocidos”, entre ellos el virus sincitial respiratorio (VRS), el metapneumovirus humano (HMPV), el SARS-CoV-2 (causante del covid-19) y el de la gripe estacional. También han señalado que los niveles de atenciones en los hospitales de China están dentro de lo habitual.
Lo cierto es que en medio del temor que genera en la población mundial, y, por supuesto la hondureña, de estar a las puertas de una nueva pandemia similar a la del covid-19, que le arrebató la vida a millones de personas y golpeó las economías de los países, se deben tomar todas las precauciones que sean necesarias para hacer frente a estas nuevas amenazas sanitarias.
La recomendación es válida para todos los países, pero en especial para Honduras, donde contamos con un sistema sanitario deficitario, que no está preparado, ni cuenta con los presupuestos para hacer frente a una alta demanda de atenciones por esta o cualquier otra causa.
Para el caso, diagnosticar el metapneumovirus tiene un costo aproximado de 16,000 lempiras en el sector privado, mientras que la Secretaría de Salud no cuenta con el equipo ni con el presupuesto para realizar ese tipo de análisis.
Sean o no comunes los virus que por estos días circulan en Honduras y el mundo, el llamado a la población es a atender las recomendaciones sanitarias para evitar cualquier contagio.
