Un reducido grupo de estudiantes que se oponen a la reelección de las actuales autoridades universitarias mantienen tomadas las instalaciones del campus de Tegucigalpa desde el martes anterior en detrimento de las actividades académicas y administrativas de miles de estudiantes que están por cerrar su segundo periodo académico del presente año.
Los estudiantes dicen ser miembros de uno de los frentes históricos de la UNAH, el Frente de Reforma Universitaria (FRU), que en los últimos años casi había desaparecido del mapa estudiantil y que incluso no tuvo participación en las elecciones de abril de 2022.Portavoces del movimiento que han comparecido ante la prensa encapuchados, denunciaron que en la máxima casa de estudios se pretende “llevar a cabo un proceso de reelección ilegal, violentando la normativa universitaria”.
Para el rector Francisco Herrera, que todavía no confirma si participará en el proceso de selección del nuevo rector como aseguran grupos estudiantiles que se oponen a su reelección, dijo que este es un movimiento que tiene tinte político, de gente con un interés enorme por tener control de las autoridades universitarias.
Herrera dijo que han logrado identificar a por lo menos tres personas que estarían detrás del movimiento de protesta y que las mismas “no tienen nada que ver con la UNAH”.
No podemos desconocer que los políticos del patio siempre han buscado influir en la selección de las autoridades universitarias, lo que esperamos que no ocurra ahora, y que por primera vez dejen que la institución elija libremente a sus nuevos líderes y que ellos sean profesionales comprometidos con elevar la calidad académica y manejar correctamente los recursos que el Estado les confía para la formación de sus jóvenes en las diferentes áreas del saber.