Ya estamos finalizando el año 13 del siglo XXI, pero en Honduras parece que estamos en el siglo XVIII, en el XIX o más bien en plena Edad Media.
Algunos de los más recalcitrantes todavía difunden la idea de que la criminalidad que hoy sufrimos es culpa del servicio militar voluntario, que no se mete a la cárcel con los adultos a los menores de edad que delinquen, que se les quitó el poder a los militares y otras sandeces.
Todos los años vemos que Finlandia es el país que tiene el mejor sistema educativo del mundo, con menos de 200 días de clases al año y nosotros casi armamos un festival porque el farsante ministro de Educación dice que se llegó a los 200 días de clases, y hasta dice que eso hizo que menos niños repitieran y que menos niños se retiraran de las escuelas.
Y todo porque para el gobierno el desastre de Educación es culpa de los maestros y el de Salud es responsabilidad de los médicos.
Andamos tan retrasados que nos creemos la propaganda que los matrimonios homosexuales son los culpables de la inmoralidad existente; que los anticonceptivos, incluyendo la píldora del día después y hasta los condones son los culpables que a las muchachas les guste el sexo y salgan embarazadas.
Les creemos a los farsantes que nos dicen que la educación sexual es nociva, cuando sufrimos una altísima tasa de embarazos de adolescentes por pura ignorancia.
Quitémosnos las telarañas que nos impiden mirar las cosas como son.