TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Un joven con un espíritu inquebrantable ha demostrado ser Wilson José Berríos, de 18 años. Toda Honduras se ha volcado a apoyar al muchacho que sufrió lesiones en su rostro luego de la explosión de un mortero.
El joven que perdió el ojo izquierdo, su nariz quedó destrozada y sufrió una lesión en sus labios, se mantiene firme y con su fe intacta, mientras se recupera en el Centro Hondureño para el Niño Quemado (Cehniq), de la Fundación por la Vida del Niño Quemado (Fundaniquem).
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Wilson Berríos, padre del muchacho, lo acompaña desde que la noche del 11 de diciembre, cuando sufrió un ataque de parte de manifestantes que lanzaron piedras y morteros, mientras laboraba en la Villa Navideña de Choluteca.
El jueves, Wilson José manifestó su agradecimiento por las muestras de solidaridad de la población.
“Me siento muy feliz porque la gente me ha dado cariño, amor y se preocupan por cómo estoy, quiero darle gracias a todos por estar pendientes de como estoy, un abrazo a todos, los quiero”, así se pronunció Wilson José en una llamada telefónica que QHubo TV le hizo a su padre y lo puso unos segundo al teléfono.
El joven fue evaluado el jueves por un neurocirujano y será intervenido el próximo lunes.
Cancelan viaje a Guatemala
Iba a ser trasladado el jueves a Guatemala para someterlo a un procedimiento de neurocirugía pero se canceló debido a que sus padres rechazaron que su hijo fuera movilizado.
La periodista Karen Sauceda, madre de crianza de Wilson, explicó en TN5 que desconoce quién hizo la gestión para el traslado, donde el único propósito es realizarle una intervención “que también se le puede hacer en Honduras”.
El vuelo estaba listo para despegar ayer desde la Base Aérea Hernán Acosta Mejía.
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