TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En su tercera edición, la Feria del Libro de San Pedro Sula deja de lado su condición de nacional y se convierte en internacional con la presencia de escritores de México, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, España y Francia.
Será del 17 al 19 de noviembre que se desarrollará el evento en el Polideportivo de Unitec en San Pedro Sula, donde también estarán reunidas más de 40 editoriales y librerías.
Y entre todos los invitados(as) está la escritora mexicana Liliana Blum, que estará en Honduras presentando su más reciente obra “Un descuido cósmico”, y previo a su visita al país, conversamos con ella.
¿Cómo son los personajes de Liliana Blum, de qué las(os) dota y de qué las(os) deja desprovistas(os)?
Mis personajes siempre son mujeres que luchan contra las imposiciones sociales (juventud, delgadez y belleza) y también contra el miedo infundado a la soledad.
Al mismo tiempo, todas se enfrentan a todos los tipos de violencia, abusos, desde los más sutiles hasta los más brutales, pero mis personajes no se asumen víctimas, sino que toman cartas en el asunto y buscan cambiar sus propias condiciones.
¿Cuáles son esos temas en los que ha profundizado en su literatura y cuáles aún los considera tarea pendiente?
No suelo proponerme profundizar o tratar ningún tema a la hora de escribir. Yo solo busco contar una historia, lo hago, y en el proceso van saliendo diversos temas que supongo se generan de la realidad en la que estoy inmersa.
Sin duda se podría decir que he explorado muchos temas (la violencia, el desamor, la pedofilia, el asesinato, la soledad, la venganza, etc.), pero creo que todos son subproductos de lo que realmente me intriga, me asusta y me apasiona: el lado oscuro de la naturaleza humana.
¿Cuál considera es la mayor fortaleza de usted como escritora?
Es una pregunta difícil de contestar sin parecer soberbia, pero creo que mis descripciones suelen ser poderosas, así como la exploración que hago de la psique de todos mis personajes, al punto que mis lectores pueden entender/comprender incluso a los que cometen actos deleznables.
Hay una discusión entre literatura femenina y quienes dicen que la literatura es literatura independientemente de quién la escriba, ¿cuál es su apreciación al respecto?
Existe literatura de calidad escrita por hombres y mujeres, y existen libros que difícilmente deberían ser calificados como literatura, también escritos por seres humanos de ambos sexos. Ahora bien, me parece que los elementos que nos vuelven hombres o mujeres (genes, crianza, sociedad, y nuestras propias experiencias únicas y personales) nos dan una visión del mundo única, y que es lo que más adelante se traducirá como literatura con un adjetivo como “femenina”, por ejemplo.
“La forma en la que una víctima se percibe y lo que decide hacer a partir de su experiencia es lo que separa a mis personajes de otros”.
Es una discusión bastante estéril, creo, y que puede terminar dando círculos sin llegar a nada. Lo cierto es que lo que yo escribo, por ejemplo, conecta muchísimo con mis lectoras (todas ellas mujeres), y cuando yo soy lectora, lo que escriben mis autoras favoritas (Margaret Atwood, Rosario Castellanos, Joyce Carol Oates, etc.) conecta directamente conmigo.
Jamás pude relacionarme o verme en la literatura hecha por hombres, nunca he podido empatizar con los personajes femeninos creados por escritores hombres.
Entonces sí creo que hay algo (indescriptible, indescifrable) en la literatura hecha por mujeres.
¿En noviembre es la primera vez que viene a Honduras?
Es correcto. Este año tuve la oportunidad de ir a Guatemala y el año pasado, a Panamá. Así que estoy muy contenta de poder conocer, aunque un poquito y por un par de días, Honduras.
¿Qué expectativas tiene sobre su presentación?
Sólo espero que mi sala no esté vacía y haya un poco de público. No hay nada mejor para mantener humilde a un autor que sacarlo de su país y llevarlo a un territorio donde no se le conoce bien. Me encantaría que hubiera algo de público y que se interesara en la presentación de modo que pudiera tener comentarios y preguntas al final. Ya si además se venden algunos libros, qué mejor.
Obra publicada
La trayectoria literaria de Liliana Blum se ha desarrollado entre el relato y la novela. En relato ha publicado: “Todas hemos perdido algo”, “Tristeza de los cítricos”, “No me pases de largo”, “Yo sé cuando expira la leche”, “El libro perdido de Heinrich Böll”, “Vidas de catálogo”, “¿En qué se nos fue la mañana?”, “La maldición de Eva” y The Curse of Eve and Other Stories.
En novela: “El extraño caso de Lenny Goleman”, “Cara de liebre”, “El monstruo pentápodo”, “Pandora” y “Residuos de espanto”.