Santa Rosa de Copán, Honduras. -El comunicador social Eugenio Membreño Turcios se enfrenta a una condena que oscila entre 35 y 45 años de cárcel, luego de ser encontrado culpable de los delitos de asesinato y tentativa de asesinato en perjuicio de dos amigos de su hija.
La noche del 28 de mayo de 2023, Carlos Efraín Sanabria y un amigo (testigo protegido) arribaron a la vivienda de Membreño Turcios en el barrio El Centro, en Belén, Lempira, a visitar a su hija, quienes compartieron hasta horas de la madrugada. .
Sin embargo, los jovencitos fueron sorprendidos por Eugenio Membreño, quien se molestó por la presencia en su casa de los jóvenes, por lo que ordenó a sus guardaespaldas que los registraran, los obligaron a arrodillarse y los ataran de las manos.
Después que los ataron, los ingresaron a la piscina de la vivienda y les advirtieron que morirían ahogados; posteriormente los sacaron de la casa y los llevaron en un vehículo a un puente en la entrada del municipio de Belén.
“El señor Eugenio Membreño les disparó causando la muerte de inmediato a Carlos Efraín Sanabria Ayala; mientras tanto, al otro joven le infirió dos disparos y creyéndolo muerto, el sentenciado y sus empleados se fueron del lugar, el ofendido fue auxiliado rápidamente por lo que logró sobrevivir”, subraya el requerimiento fiscal.
En los próximos días se llevará a cabo la audiencia de individualización de la pena en donde los fiscales solicitarán la pena máxima de 45 años de cárcel contra Eugenio Membreño, informó el Ministerio Público.
Testimonio clave
A lo largo del juicio que se extendió durante varias semanas, el relato del jovencito que acompañaba a Sanabria, reveló cada detalle de como Eugenio Membreño y sus guardaespaldas los torturaron.
Fue el propio Membreño Turcios quién los amarró con un lazo y los sumergió repetidamente en una piscina en un intento de ahogarlos.
Luego, los trasladó en un vehículo a las cercanías del río, donde disparó sin remordimientos a los menores.
El sobreviviente fingió estar muerto tras recibir un disparo en el rostro, logrando así escapar de la misma suerte que su amigo.
Castigo severo
En redes sociales, familiares y amistades del joven Carlos Efraín Sanabria aplaudieron el fallo de culpabilidad contra el periodista y exhortaron a que se dictara un severo castigo de prisión en su contra.
“Dios permitió la justicia en la tierra. El asesino pagará por su crimen”, señaló Ingrid Peña, amiga de la familia Sanabria.
El Código Penal indica un castigo de entre 20 y 25 años de prisión para el responsable de cometer el delito de asesinato, mientras que para la tentativa acabada de asesinato la pena oscila entre 15 y 20 años de reclusión.
Glendy Maribel Ayala, madre de Carlos Sanabria, declaró: “Jamás. Esos años de prisión no van a devolver a mi hijo. Pero, gracias a Dios, se pudo hacer justicia”.
“Es un caso tan aberrante que al solo escuchar los hechos relatados por la Fiscalía se evidencia el trato inhumano que recibieron los cipotes; entonces, era justo que se hiciera justicia”, manifestó Ayala.