En una galera y solo con la presencia de su madre fueron velados los restos mortales de la hondureña G loria Estela Brizuela, de 31 años de edad, quien fue asesinada la noche del lunes por su pareja tras un ataque de celos.
Horas más tarde, su madre doña María Elena se dirigió a la morgue de la zona norte para reclamar el cuerpo de su hija y velarla en la colonia El Paraíso, sector de la Rivera Hernández, de la ciudad de San pedro Sula, Norte de Honduras.
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“En las manos de Dios dejo todo yo, que el señor tome justicia… Él está conmigo y quién contra mí, como dice la palabra del señor”, citó la acongojada madre, quien lloraba a la par del féretro donde estaba el cuerpo de su hija.
La entrevistada contó que su hija deja cuatro niños menores de edad, de los cuales dos eran de Olvin Josué Sánchez, pareja sentimental de la fémina, quien le quitó la vida a pedradas la noche del lunes en la colonia Flor de Cuba producto de un ataque de celos.
La acongojada mujer relató que su hija anduvo de paseo en su casa, sin embargo, no le contó si tenía problemas con su pareja. “Ella no me dijo nada de él, sería por no afligirme a mí o por no preocuparme”.
“Gloria era un cipota humilde. Yo quiero que a él no lo dejen libre, que pague muy caro lo que ha hecho”, exclamaba la mujer, al mismo tiempo que recordó que el año pasado la violencia también le arrebató la vida de otro de sus hijos, quien fue ultimado mientras se dirigía hacia su trabajo.
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