COMAYAGUA, HONDURAS.- “Había ganado un concurso, andaba buscando una plaza y quería saber dónde le tocaba”, dijo acongojado don José Ubaldo Canales, padre de la Rosa Delia Canales, la maestra que falleció el pasado lunes en una masacre por supuesto conflicto de tierras en Comayagua, zona central de Honduras.
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Según informó su progenitor, en la mañana estuvo con ella, pero en la tarde se dirigió a la Departamental para indagar sobre su nueva plaza. Sin embargo, al anochecer tomó el ‘jalón’ de la familia Del Cid para regresar a su casa, pero nunca llegó.
Sujetos armados los interceptaron en un vehículo pickup donde iban los seis familiares y tres personas particulares, entre ellos la maestra Canales y un pastor identificado como Hernán Domínguez.
Todos fueron atacados a disparos, imágenes que circularon por las redes sociales muestran cómo los cadáveres quedaron ensagrentados al interior y en la paila del vehículo, el cual tenía varios orificios de arma de fuego.
Según reveló el padre de la maestra, ella tenía cinco años de experiencia en el rubro. De hecho, le había dado clases a los jóvenes de la familia Del Cid, por lo que le ofrecieron jalón ya que la conocían.
Rosa Denia Canales, de 35 años, era también madre de dos niñas de siete y once años, quienes quedarán ahora a cargo de su esposo, un cortador de café.
Este martes don José reclamó este martes el cadáver de su hija Rosa Canales para iniciar la velatoria en su lugar de origen y proceder a la cristiana sepultura.
Las demás víctimas de la masacre fueron identificadas como Henry Ismael Aguilar Del Cid, Eduin Anael Hernández, Linder Aguilar Del Cid, Miguel Aguilar Del Cid, José Aguilar Morales, Ismael Aguilar Morales, Carlos Humberto Aguilar Del Cid y el pastor Hernán Domínguez.
