TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El cuerpo del pequeño Nickey Louis Shilove Emisca (2) fue entregado la noche del sábado en la morgue de Tegucigalpa, capital de Honduras, hasta donde había sido trasladado para realizarle su autopsia respectiva.
El menor, nacido en Brasil, murió ahogado el pasado 28 de septiembre, cuando junto a su madre, padrastro y otros migrantes, intentaban cruzar un río a bordo de una canoa que se hundió a causa de la fuerte corriente.
El trágico hecho tuvo lugar en el río Guayambre, que recorre varias comunidades del departamento de El Paraíso, al oriente del país. El afluente se encontraba crecido debido a las fuertes lluvias que han azotado el territorio en las últimas semanas.
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La haitiana Emisca Shilove, madre del menor, se trasladó hasta la morgue acompañada de otros migrantes que le sirven como intérpretes, pues ella no habla español o inglés. Además, la acompañaron autoridades hondureñas que la ayudaron a realizar los trámites para reclamar el cadáver del niño.
Según se conoció el sábado, Emisca accedió a que su hijo sea enterrado en Jamastrán, El Paraíso, pues no contempla retornar a su país de origen o a Brasil, ya que su meta era llegar a Estados Unidos con su familia, ruta que seguirá sola tras dar sepultura a sus seres queridos.
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De igual manera, las autoridades continúan buscando a Billy Sontesr, pareja de la fémina y padrastro del pequeño Nickey, pues él también fue víctima de la embravecida corriente, pero su cuerpo no ha sido encontrado.
En el naufragio también pereció un ciudadano venezolano que viajaba en el grupo que abordó el pipante, quien fue identificado como Jerry Junior Contreras Sosa.
Por el caso ha sido detenido el hombre que transportó a los migrantes en la canoa, quien responde al nombre de Nelson Rubí Espina Fúnez a quien se le señaló por los delitos de tráfico ilícito de personas y homicidio imprudente en perjuicio del Estado de Honduras y de los tres migrantes.
El individuo es un agricultor de 54 años, originario y residente del mismo lugar donde se le requirió, pero familiares y vecinos aseguran que él no se dedica al tráfico de personas, sino a cruzar desde un extremo a otro del río cualquier persona o carga que se le solicite.
De momento, el implicado fue remitido por la fiscalía al centro penal de Danlí, El Paraíso, a la espera de la continuidad del proceso.
