TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Elementos de la Policía Nacional resguardaron un centro asistencial capitalino, luego de que trascendiera que un sujeto ingresó a emergencias en horas de la madrugada, cuando se registró la masacre que acabó con la vida de cuatro personas, entre ellas, el hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa.
Esta información se conoció luego de que circulara el escalofriante video de los hechos, el cual muestra el momento en que uno de los asesinos cae al suelo tras recibir un disparo en la pierna y es auxiliado por uno de sus aliados para poder abordar el vehículo en el que se conducían.
Según declaró el presidente Lobo, Norlan Rivera, chofer de su hijo, es quien habría disparado contra el sicario. “Aparentemente el muchacho de seguridad, el motorista que también tiene arma, disparó, pero no sé qué más paso”, reveló.
Inicialmente, se creía que el individuo habría acudido al Hospital Escuela (HE), pero esta información fue descartada por Franklin Gómez, coordinador de Gestión Clínica Hospital Escuela, quien explicó que se realizó una inspección en la emergencia y no había algún paciente con las características de haber participado en el hecho violento.
De modo que miembros policiales han montado un fuerte operativo en las afueras de un centro asistencial privado situado en la ciudad de Comayagüela, donde supuestamente estaría el individuo.
Cabe señalar que al momento de la masacre, los sujetos portaban pasamontañas, armas de grueso calibre y estaban uniformados como fuerzas de seguridad.
Las víctimas de la masacre fueron identificadas como Luis Armando Zelaya Rivera, Norlan Enrique Rivera Rodríguez, Said Lobo Bonilla (hijo del exmandatario) y Salomón Vásquez.
Hasta el momento, la Policía Nacional ha declarado que la Mara Salvatrucha (MS-13) es quien estaría detrás del sangriento hecho.