TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Abel Zelaya, hermano de Luis Zelaya, una de las víctimas de la masacre ocurrida la madrugada de este jueves en la entrada al estacionamiento de un edificio situado en el bulevar Morazán de Tegucigalpa, capital de Honduras, llegó consternado a la morgue judicial para retirar su cuerpo y lamentó que minutos antes del crimen él estuvo a su lado.
Abel contó a la cámara de EL HERALDO que ambos acudieron a la fiesta realizada en la popular discoteca, pero que de repente se comenzó a sentir cansado y decidió irse, dejando a su hermano y al resto de sus amigos en el lugar, donde a la vez se realizaba un concierto de artistas hondureños.
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“Yo me quería ir. Él siempre caminaba conmigo, pero yo me quería ir a dormir por eso me fui”, dijo el joven con el rostro desencajado, al tiempo que destacó que su hermano era un buen muchacho, graduado en una de las instituciones más prestigiosas del país y emprendedor, pues actualmente tenían un negocio juntos.
Los jóvenes, quienes son sobrinos del general en condición de retiro, Romeo Vásquez Velásquez, tenían una empresa de venta de cortes de carne y en el caso de Luis, había estudiado en la Escuela Agrícola Panamericana, mejor conocida como El Zamorano y actualmente cursaba otra carrera en una universidad de Guatemala, pero de manera virtual.
“Mi primo tenía una vida por delante”, dijo un primo del joven, “estamos sufriendo mucho aquí y en el extranjero, se tiene luchar para tener seguridad ciudadana”, agregó.
En el hecho violento también perdió la vida Said Lobo Bonilla, hijo del expresidente de Honduras Porfirio Lobo Sosa, Salomón Vásquez, amigo de Luis y de Said y Norlan Enrique Rivera Rodríguez, conductor del hijo del exmandatario.
Los cuatro jóvenes se disponían a salir del centro de entretenimiento a bordo de dos vehículos diferentes, cuando sujetos fuertemente armados y vistiendo indumentaria que aparentaba ser de uso policial, los obligaron a bajar y posteriormente les dispararon.
Hasta el momento se desconoce el móvil del hecho violento, al igual que la identidad y el paradero de los responsables.
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