Tegucigalpa
La hipersensibilidad en la piel es la reacción inmunitaria exagerada del organismo ante sustancias que no son habitualmente dañinas, llamadas alérgenos o antígenos, compuestos que nuestro organismo no procesa y se desarrolla en síntomas como piel seca, enrojecida, inflamación, escozor e incluso ardor. Sus causas recaen en una amplia serie de factores, desde desórdenes del sistema inmune, medicamentos, hasta infecciones.
Presentar una afección en la piel requiere de sumo cuidado, tratamientos de por vida, ya sea a través de medicamentos o evitando la sustancia responsable de la reacción. A continuación le presentamos las más comunes. Cabe señalar que las alergias de piel se fraccionan en dos subgrupos: la dermatitis (que puede clasificarse en dermatitis atópica y dermatitis de contacto) y la urticaria. Esta última se caracteriza por la presencia de manchas y áreas de inflamación rojiza, acompañadas de una intensa picazón (prurito) e incluso puede producir quemazón y dolor.
¿Cuáles son las causas?
Usualmente el origen recae en alimentos, medicamentos, infecciones (primordialmente de parásitos intestinales) e inhalación de alérgenos. En el caso de urticarias crónicas pueden ser originadas por condiciones climáticas (frío, calor, agua, sol), actividad física y enfermedades autoinmunes.
Un tipo específico de esta reacción es la denominada angioedema o edema angioneurótico, que afecta las capas más profundas de la piel y suele presentarse en zonas del rostro como párpados, pabellones auriculares, genitales, extremidades superiores e inferiores, en forma de lesiones de tipo habón o inflamación blanquecina. En tanto, la dermatitis atópica, mejor conocida como eczema, es una inflamación de la piel que se determina por lesiones cutáneas con piel roja (eritema), descamación, vesículas, exudación, fisuras, lesiones de rascado y zonas inflamadas con persistente prurito generalmente ubicadas en zonas de pliegues (brazos, cuello y rostro).
¿Es una afección hereditaria?
De acuerdo con médicos especialistas, las causas del eczema que se manifiesta antes de los tres años de edad y sigue apareciendo de forma constante a lo largo de la vida, se desconocen con exactitud.
Sin embargo, el factor hereditario juega un papel fundamental. Tres de cada cuatro pacientes con antecedentes familiares de enfermedad alérgica (rinitis o asma alérgico) desarrolla dermatitis atópica cuya predisposición genética ocasiona alteraciones imperceptibles de la piel que predisponen al aumento de las pérdidas de agua, bajas en el sistema inmune y predisposición a las infecciones. Recuerde que al igual que la mayoría de las enfermedades alérgicas, esta tiene un curso crónico y puede asociarse a otras enfermedades alérgicas alimentarias o respiratorias.
En el caso de la dermatitis de contacto, inflamación de la piel causada por el contacto directo con sustancias irritantes (plantas, níquel, látex, cosméticos, detergentes, fragancias y otras sustancias químicas), se caracteriza por la aparición de prurito en las áreas de irritación y erupción de la piel. Se produce posteriormente un enrojecimiento con pequeñas vesículas con tendencia a desecarse, formándose una costra y descamándose como etapa final