TEGUCIGALPA, HONDURAS-. “Ya tenemos tres días de estar en este lugar y literalmente por falta de dinero no podemos avanzar”, expresó Valentina Salazar, una venezolana que acampa junto a 10 de sus compatriotas en el Parque El Obelisco de Tegucigalpa.
Salazar narró que cuando llegaron a Danlí, El Paraíso, fueron víctimas de robo de sus pertenencias, pero “estoy agradecida por el apoyo de los hondureños”.
Sin embargo, resiente la falta de apoyo de parte de las autoridades de Migración, “durante los tres días que hemos estado acampando nos han ofrecido ningún apoyo, somos 11 incluyendo tres niños”, refirió.
Efectivamente, hay mucho migrante irregular que durante su estadía en la capital no es atendido por el Instituto Nacional de Migración y puede darse por diferentes motivos, bien porque prefieren pedir ayuda en las calles o porque no tienen suficiente información de los lugares de atención.
Pese a que muchos como Valentina Salazar no forman parte de los datos oficiales, el Instituto Nacional de Migración reporta que del 1 de enero al 9 de septiembre del presente año fueron atendidos 45,523, en su mayoría de nacionalidad cubana, haitiana y venezolana.
Atención
Joseana Martínez, gerente de Derechos Humanos y Atención al Migrante, manifestó a EL HERALDO que hay dos centros de atención en Tegucigalpa, uno ubicado en Toncontín y otro en Altos de Toncontín “donde tenemos espacio para alojar 50 personas con atención médica, alimentación y hospedaje por una noche”.
Martínez explicó que algunos indocumentados llegan al centro de atención “mediante organismos que los retienen”, mientras que otros son captados a través de un monitoreo en calle por oficiales de inspectoría y de derechos humanos del Institución.
“Si vemos personas en la calle, se les menciona el lugar y se les transporta en los vehículos del Instituto, a los que acceden, porque hay a quienes no les interesan estos espacios debido a que prefieren quedarse en esa zona porque ahí recolectan dinero para seguir su camino”, explicó Martínez.
Agregó que las zonas donde los migrantes irregulares toman su estadía es principalmente en Comayagüela, en las terminales de buses.Según datos oficiales, en Tegucigalpa se queda menos del 1% de los indocumentados que ingresan por el oriente del país.
Por su lado, la oficial de derechos humanos del Instituto, Cinthia Mejía, amplió que a los migrantes se les da toda la atención médica necesaria y al momento de su salida les “entregamos unos kits que contienen productos de uso personal: pasta de dientes, toallas sanitarias, papel higiénico y jabón de baño, entre otros”.
Dijo que estos kits son diferenciados para hombres, mujeres y niños.Entre las atenciones que realiza el Instituto Nacional de Migración está el registro biométrico, asistencia humanitaria y acompañamiento en orientación legal.
Por su parte, la Alcaldía Municipal del Distrito Central mencionó que no cuenta con centros de atención al migrante irregular.Según Migración, en lo que va del año, en el país se ha atendido a más de 230 mil desplazados, principalmente en la ciudad de Danlí, El Paraíso.
Especialista
El especialista en tema de migración, Ricardo Puerta, refirió que Honduras debe dar la misma atención que desea que le den a sus compatriotas, pues del país salen muchos migrantes que cruzan Guatemala y México.
“La gente va a sacar lecciones de cómo tratan al migrante de paso por Honduras. Entonces van a decir: así tratas a la gente que pasa por tu territorio, pues así vamos a tratar a los connacionales tuyos cuando pasen por mi territorio”, expuso Puerta.
El entrevistado consideró que Honduras necesita estar más organizado en cuestión de atención al migrante irregular, “en mi opinión lo que tienen que hacer es agarrar a los migrantes desde que entran en Honduras y de una sola tirada ponerlos en la frontera con Guatemala para que pasen de un solo golpe y no los estén bajando, porque cada vez que cambian de buses están cobrando peaje”, manifestó Puerta.
Llamó a la Policía Nacional de Honduras a evitar la corrupción y proteger a los migrantes durante su recorrido por el país
