“Conozco una chica en esta ciudad, es flaca, perezosa y no sabe bailar”… ¿Quién no ha escuchado esta pegajosa y rítmica canción que representa a uno de los colegios más insignes del país y de todo Centroamérica como lo es el Instituto Centra Vicente Cáceres (ICVC)?
A pocos días de celebrar los 195 años de independencia patria, los jóvenes de la banda marcial de este importante colegio capitalino afinan sus instrumentos y le ponen color a su música para poner con los pelos de punta a las miles de personas que esperan su llegada al Estadio Nacional.
Fotogalería: Estas son las hermosas palillonas del Instituto Central Vicente Cáceres
Con el cálido sonido que desprende el clarinete, el estilo que pone el saxofón y las maravillosas notas convertidas en música por los redoblantes y las trompetas, este importante ente educativo ya está listo para trasladar el placer que da la música a los oídos de los cientos de hondureños que visitarán el coloso capitalino.
Al entrar a este legendario colegio, la música de sus instrumentos suena todo el día debido a que un gran grupo de estudiantes se esfuerzan cada hora para hacer de su ritmo un dulce musical que acapare los aplausos de los presentes en el Nacional.
Inspirados por el 138 aniversario del colegio y los 75 de la banda, los muchachos dan lo mejor que tienen para que el Central siga brillando como lo ha venido haciendo siempre.
Fotogalería: Estas son las hermosas palillonas del Instituto Central Vicente Cáceres
El director del Central, Alejandro McCarthy, dijo que el instituto que rectora ha trabajado mucho para que las personas que los lleguen a ver al Estadio Nacional queden totalmente complacidas.
138Aniversario cumple el ICVC |
Las jovencitas de cuerpo esbelto, mirada coqueta, sonrisa dulce y rostro hermoso, ya tienen listos sus cálidos movimientos que darán a conocer el día que pisen la pista olímpica del Estadio Nacional de Tegucigalpa.
Estas adolescentes son uno de los regalos más sorprendentes que dejan las fiestas patrias y miles de personas salen temprano de sus casas para poder deleitar su mirada cuando estas chicas realizan sus movimientos coordinados con el ritmo de la música.
¡Qué bonito es lo bonito! Seguro que esta frase será exclamada por miles a la hora en que las chicas del Central comiencen a bailar y brillen con sus pasos, con los cuales se han ganado el respeto y la admiración de los hondureños.