Tegucigalpa,. Honduras.- El estruendo de las máquinas, el trajín de los trabajadores y el polvo que se levanta al compás de cada movimiento son ahora el escenario cotidiano en varios puntos de la capital.
Este movimiento se debe a los trabajos de mejoras que realizan en las colonias Nueva Capital, José Ángel Ulloa y la aldea El Lolo.
Estas comunidades, que durante años soportaron el deterioro de sus calles, finalmente ven un rayo de esperanza con los trabajos de conformación de terracería y balastado que ejecuta la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC).
El proyecto busca algo más que reparar vías, es un esfuerzo por mejorar la calidad de vida de los habitantes, que han enfrentado desafíos diarios para movilizarse entre calles intransitables y llenas de baches.
Las comunidades enteras observan con optimismo cómo sus calles comienzan a transformarse en rutas más seguras, útiles y dignas.
Las autoridades han enfatizado que estos trabajos son parte de una estrategia más amplia para atender los puntos críticos de la capital.
El impacto de estas obras no se limita al tránsito vehicular. Los residentes también destacan cómo el mejoramiento de las calles contribuye a la seguridad vial.
Estas obras se extenderán por varias semanas, ya que son varios kilómetros.
Al devolver la funcionalidad a estas vías principales se garantiza una mayor conectividad entre barrios y colonias, facilitando no solo el acceso a servicios básicos, sino también a oportunidades de desarrollo, explicaron las autoridades edilicias.
En los planes de la municipalidad capitalina también está pavimentar estas importantes vías de la ciudad.