TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La temporada lluviosa que inicio este lunes reportó hasta 90 milímetros (mm) de agua acumulada en el sector de El Hatillo y zonas aledañas a la capital de la República.
La Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales, a través del Centro de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), registró que en zonas como La 21 de octubre cayó una cantidad de 52 mm de agua acumulada y 21 en El Picacho, y en lugares aledaños.
Estas precipitaciones eran esperadas por los capitalinos, ya que, según los expertos, venían a disipar el humo y bruma que cubrió los cielos de la capital en los últimos meses.
Asimismo, aumentará el nivel de las represas para evitar escasez de agua que sufre la ciudad para esta época.
Francisco Argeñal, director de Cenaos, pronosticó que en los siguientes tres días se espera hasta 30 milímetros de agua en el Distrito Central.
“Estamos pronosticando de 20 a 30 milímetros acumulados y de manera aislada hasta de 60 milímetros”, indicó Argeñal.
Carlos Bonilla, subgerente del Comité de Emergencia Municipal (Codem), manifestó que ante las presencia de las lluvias: “Realizamos monitoreos en los lugares más expuestos de la ciudad para estar atentos a cualquier emergencia”.
Agregó que los capitalinos que viven en zonas de alto riesgo puede marcar la línea 100 para reportar cualquier daño o si se sienten amenazados por las lluvias
Cae muro en Los Jucos; 12 familias son las afectadas
Como un gran estruendo fue descrito el incidente que ayer, por la madrugada, dejó sin hogar a más de 12 familias del barrio Morazán, sector Los Jucos.
En este lugar la Alcaldía del Distrito Central, desde el 14 de febrero, ejecuta obras de mitigación para contrarrestar las inundaciones que se dan por el desbordamiento de la Quebrada La Orejona.
Según las descripciones de los ciudadanos, el muro que sostenía un complejo de cuatro habitaciones y otro de dos cedió a causa de las primeras precipitaciones que cayeron en Tegucigalpa.
“Solo escuchamos el estruendo y todos gritamos ‘Dios mío, sálvanos de este mal’; estuvimos asustadas porque creíamos que las casas se iban a caer cuando salimos a ver el muro derribado”, comentó Wendy Salgado, una de las vecinas afectadas.
Los supervisores del proyecto en Los Jucos aseguraron que se buscará un hogar provisional con todas las comodidades para las familias en riesgo mientras hacen la reconstrucción del muro.
También indicaron que la caída del paredón no estaba prevista y deberá utilizarse otro presupuesto