Tegucigalpa, Honduras.- Un robo de piezas sufrió el velero “Rosalinda” sin siquiera haber tocado mar y aun sin concluir su construcción, según informó´su propietario Marlon Martínez.
Martínez reveló que se encontraba en la construcción de un nuevo troco por recomendación de la Fuerza Naval, por lo que se vio obligado a solicitar un préstamo bancario para la compra de materiales y así fabricar el nuevo “troco”.
“El troco se dañó y siguiendo la recomendación que me dio la Naval hicimos este nuevo troco para poder mover el barco, entonces se hizo la cotización del material y todo se invirtió más de 60.000 lempiras en solo material, pero lastimosamente hace como semana y media, pues me robaron parte de material, no puedo acabar el troco porque me quedé sin fondos, quién sabe, sabe que es carísimo”, declaró el apesarado dueño.
Del mismo modo, aseguró que él mismo y la comunidad saben quién es el responsable del robo, pero afirmó que no tiene contemplado poner la denuncia a las autoridades.
“Yo sé quién es, la comunidad sabe quién es, pero, pues yo soy cristiano, soy testigo de Jehová y entonces si aquí las cosas se manejan de otra manera de un modo distinto, entonces yo quiero estar un poco aparte de eso”, reveló Martínez.
Del mismo modo, aseguró que realizó ajustes en la quilla del barco luego que una persona desde España se contactó con él para realizar ajustes en su velero.
“Por internet me contacté con una persona que me dio las especificaciones y las medidas en base al velero de esta nueva quilla, entonces y así poderlo bajar, va a quedar mucho más bajo y así poder llevarlo”, declaró.
Tras ser movido de la colonia El Reparto de la capital, lugar donde la embarcación estaba varada y ser llevado hasta otro sector, Marlon Martínez confía que “Rosalinda” será puesto en mar abierto.
¿Cómo fue la construcción de “Rosalinda”?
El velero llamado “Rosalinda” surgió la idea de construir esta embarcación y su sueño de poder navegar en ella después de varios años de experiencia en la elaboración de este tipo de proyectos y otras construcciones.
“Es algo que planeé por seis años y ya después el año pasado, para los últimos días de octubre, fue cuando se inició con los arcos del velero y llevar a cabo todo el trabajo que pueden ver”, describió Martínez cuando EL HERALDO le realizó una entrevista en agosto.
“Yo realicé el diseño, lo descargué de Internet, entonces ya después hice modificaciones porque no puedes hacerlo igual a un plan original de otro país. Yo he participado en varias construcciones, he vivido eso y tengo un poquito de experiencia en cuanto a construcción”, agregó.
Posteriormente, narró con mucho sentimentalismo la razón del nombre del velero: “Ella (Rosalinda, su esposa) es la que me ha dado todo este tiempo, sería injusto de mi parte negarle el nombre, de ponerle todo este tiempo”.
El velero “Rosalinda” cuenta con un esqueleto de hierro en su casco que resalta por los colores blanco, rojo y azul. En la embarcación que reposa sobre un troco en una empinada pendiente se pueden ver algunos acabados en madera y un sistema de tuberías para garantizar su óptima navegación.
En su interior hay tesoros interesantes: el lugar donde se colocarán las velas, dos habitaciones, un área de cocina y baños para hacer que la experiencia a bordo sea inolvidable.
El gigante de hierro, llamado también como “El Titanic” por los habitantes de El Reparto, lugar donde la embarcación estuvo alrededor de siete años.