Nuevos escenarios quedan descubiertos conforme se escudriña en las negociaciones entre los transportistas y las autoridades capitalinas por la operatividad del Trans 450.
EL HERALDO confirmó, por fuentes ligadas a ambos actores, que la verdadera manzana de la discordia para la adjudicación del manejo de los buses articulados
yace en la tarifa del pasaje.
En este sensitivo punto que repercute directamente en el bolsillo el usuario, y que se arrastra desde la administración pasada, los empresarios y los funcionarios municipales no han logrado un consenso, revelaron los informantes.
Debido a lo anterior, ambas partes todavía no firman el contrato de adjudicación y, consecuentemente, no se avanza en la introducción de las unidades articuladas.
Y es que la propuesta de la empresa Inversiones Múltiples y de Transporte (Invermut)
rebasa de sobremanera lo que indican los estudios de operatividad de la Alcaldía.
Mientras que la falta de finalización de las obras grises es otro factor que los futuros operadores colocan como argumento para no avanzar en el proceso.
Tarifa
Según fuentes cercanas al tema, los empresarios del transporte vienen solicitando un pasaje de un dólar (20.78 lempiras), desde las pláticas con la anterior administración municipal.
No obstante, los estudios preliminares de la comuna, levantados con asesoría de la empresa consultora ALG Transporte y Logística, definían un valor entre 10 y 12 lempiras.
Con el ajuste del combustible y alza de precios, provocados por el anterior Congreso Nacional (CN), la tarifa probablemente se elevó, pero no debía pasar los 14 lempiras, explicó el informante.
Aunque la empresa consultora hasta definió una fórmula matemática para determinar el cobro, según documentos recabados por este rotativo, los dirigentes mantuvieron su postura.
No obstante, para el 20 de enero de 2014 ambas partes estaban obligadas a firmar el contrato, de lo contrario la Municipalidad podría llamar a licitación internacional.
La firma no se dio y la Alcaldía no concedió más prórrogas, pero la decisión final quedó en manos de los nuevos funcionarios, quienes continuaron con las pláticas.
La fecha de las negociaciones y el valor de la tarifa son claves para entender el escenario de incertidumbre.
Se quebraron planes
Según información recabada por este rotativo, las autoridades fijaron la fecha de la firma para el 20 de enero para que el proyecto arrancara en mayo, por lo menos en su fase uno.
Los buses tardarían en llegar unos cuatro meses, plazo suficiente para instalar puentes peatonales y semáforos, finalizar tramos, retornos y la terminal, así como definir sistema de recaudo, tarjetas prepago y rutas alimentadoras.
Empero la nueva administración local optó por aprobar una prórroga, lo que prácticamente hizo que las negociaciones volvieran a iniciar.
Ahora el Trans 450 empezará a operar a principios de 2015, estimó Roberto Zablah, gerente de Infraestructura de la comuna capitalina.
No obstante, los funcionarios prometen que las unidades troncales circularán en los corredores uno y dos, con la posibilidad de trasladar unos 120 mil usuarios.
Mientras que otros expertos consideran que es factible habilitar el tramo del Estadio Nacional-Kennedy
(tramo uno), pero debe existir voluntad y comenzar de lleno.
Mientras que la tarifa es clave porque su valor permitirá que el sistema del Bus de Transporte Rápido (BTR)
sea autosostenible.
Del pasaje debe salir el pago a los operadores de las unidades (transportistas), al sistema de recaudo, a la seguridad y al ente gestor, así como el respectivo porcentaje por el fideicomiso.
A los empresarios se les pagará por kilómetro recorrido, pero deben cumplir estrictos requisitos de operatividad, como horario y frecuencia de circulación, entre otros.
En este esquema se cae el juego de los transportistas locales, ya que dejarán de devengar bonos y son sometidos a la competitividad, explicó la fuente.
La apreciación fue compartida por el exalcalde Ricardo Álvarez, ya que ahora “el subsidio pasaría directamente al usuario”.
El funcionario condenó que durante su gestión los transportistas gozaron de plazos, pero que siempre colocaban excusas.
En torno al tema de la tarifa, los directivos de Invermut no han querido revelar cifras, y solo dicen que todo sigue en estudio.
