Tegucigalpa

Transportistas exigen manejo del metrobús de 20 a 25 años

EL HERALDO tuvo acceso a una carta de intención, firmada por Invermut y la Alcaldía.

    01.03.2014

    El estira y encoge al que han sometido los transportistas a las autoridades de la Alcaldía para concretar la operación del Trans 450 es un tema que parece no tener fin.

    EL HERALDO tuvo acceso a la carta de intención firmada entre representantes de Inversiones Múltiples y de Transporte (Invermut S.A. de C.V.) y el exalcalde
    Ricardo Álvarez, en la que se detallan las reglas del juego sobre el manejo del sistema.

    El documento establece los compromisos asumidos por las autoridades municipales, los representantes de Invermut y la Unidad Gestora de Programa (UGP).

    El objetivo fundamental de la carta era lograr un acuerdo para la firma del contrato de operación del Bus de Transporte Rápido (BTR), de las rutas troncales y alimentadoras.

    Entre los acuerdos preliminares se establece que se permitirá a los transportistas el uso de los microbuses como alimentadores, después de una evaluación técnica por la UGP.

    Además se permite realizar una negociación con proveedores nacionales para la adquisición de las unidades.

    Esto deja sin sustento las excusas de los transportistas, quienes aseguran que la única vía de la compra de unidades es la internacional.

    Por si fuera poco, en la carta de intención se les ofrece a los propietarios de las 400 unidades que saldrán de los bulevares Centroamérica y Suyapa una indemnización, con dos años de subsidios, validos desde el momento de la firma del contrato.

    Empero, no se establece el monto de estas bonificaciones.

    La UGP se compromete por su parte a construir el patio para la dormida de los buses -terminal-, proceso que aún no se ha iniciado y del que solo se tienen los diseños y la ubicación del predio que está localizado atrás del mercado Jacaleapa.

    Mientras tanto los transportistas debían presentar una propuesta del costo por kilómetro recorrido, respaldado por los costos operacionales y un estudio económico financiero, informe que aún no han presentado los empresarios.

    Contrato

    De acuerdo al documento, si al 20 de diciembre del 2013 las partes no llegaban a firmar el contrato de operación se lanzaría una licitación pública internacional para la operación del sistema.

    Sin embargo, los transportistas se ampararon en la cláusula I de la carta que reza que si al 20 de diciembre no se ha logrado un acuerdo se daría el tiempo necesario para alcanzar consensos y firmar el contrato.

    La petición de prórroga de los transportistas se concretó el 20 de diciembre de 2013, lo que significa que el acuerdo se ha postergado por cuatro meses desde la firma de la carta de intención.

    Causas del atraso

    Alfredo Reyes, presidente de Invermut, reconoció que desde noviembre del año pasado firmaron una carta de intensiones y reveló que en diciembre recibieron una copia del contrato.

    “Nosotros entregamos nuestras recomendaciones a ese borrador, pero no se discutió a tiempo antes que saliera la anterior Corporación y eso atraso su firma”, explicó.

    “Esta semana iniciamos de nuevo las negociaciones con las nuevas autoridades municipales y esperamos en el menor tiempo posible concretar esto”, afirmó.

    Reyes manifestó que ofrecieron al alcalde Nasry Asfura trabajar si es necesario de lunes a domingo en la revisión del contrato final.

    El mayor punto en discordia para llegar a un consenso es el plazo de la concesión, pues la UGP propone de 10 a 12 años, mientras los transportistas exigen

    “Lo que queremos como empresarios es que se nos asegure el retorno de la inversión y creemos que en 10 a 12 años no lo vamos a tener.
    Necesitamos firmar porque para darnos el financiamiento los bancos nos piden como garantía el contrato”, recalcó.

    Reyes aseguró que los representantes del rubro se han comprometido a trabajar a la par de las obras de infraestructura en la firma del contrato, financiamiento para adquirir las unidades y en su compra.

    A su juicio los retrasos radican además en la falta de los retornos, la terminal y los puentes peatonales que permitirán a los usuarios ingresar a las estaciones.

    Pese a la voluntad que expresa el presidente de Invermut, otros integrantes de la empresa, como Jorge Lanza, vaticinan el fracaso del sistema sin siquiera empezar operaciones.

    A su juicio los troncales fueron mal diseñados porque solo cubren un promedio de 200 mil usuarios, cuando en el extranjero se basan en millones de pasajeros.

    Empero, los empresarios no toman en cuenta que el proyecto está diseñado con cinco corredores que unirán las ciudades gemelas de sur a norte y de este a oeste.

    La eficiencia del sistema ha logrado que en otros países de Latinoamérica los usuarios prefieran el bus articulado que el vehículo particular.