TEGUCIGALPA, HONDURAS.-Hasta marzo del presente año, el Juzgado de la Familia contabilizó 300 divorcios en Francisco Morazán, un aumento significativo en relación con el año pasado que fueron al menos 200.
De acuerdo con las conversiones realizadas por EL HERALDO, esta cifra alarmante refleja que en cada mes 100 parejas decidieron divorciarse; lo que se traduce a tres divorcios diarios.
Ana Cardona, coordinadora del Juzgado de la Familia, explicó que la mayoría de estos divorcios son contenciosos, lo que quiere decir que no existe un mutuo acuerdo entre los esposos; la demanda es de uno contra el otro.
Sumado a ello, Cardona informó que en el mismo período, el Juzgado de la Familia ya reporta 170 demandas alimenticias.
Estos casos son indicativos de que la mayoría de las parejas no logran resolver sus diferencias de manera amistosa, por lo que tienen que recurrir a disputas legales para definir la manutención y cuidado de sus hijos.
“Hay que tomar en cuenta todos los daños colaterales que provoca un divorcio, porque no se trata de un conflicto netamente entre parejas, si hay hijos de por medio también son afectados”, manifestó la coordinadora del Juzgado de la Familia.
Añadió que cuando hay una disolución del matrimonio, en la mayoría de los casos, el cónyuge que abandona al otro cae en un incumplimiento con las obligaciones que tiene con los menores.
“Cuando las parejas se divorcian colateralmente también acumulan el tema de los alimentos”, explicó