TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En un país como Honduras, donde la salud pública debe ser una prioridad, la situación en el Distrito Central es alarmante.
A pesar de los esfuerzos continuos por parte de las autoridades sanitarias, las tasas de vacunación SRP (Sarampión, Rubéola y Poliomielitis) para niños menores de siete años están muy lejos de cumplir las metas establecidas.
Con una cobertura que apenas alcanza el 40% en 2024, el riesgo de brotes de estas enfermedades prevenibles por vacunación se convierte en una amenaza latente para la población infantil de la capital.
Los datos brindados por la Región Metropolitana de Salud (RMS) de Tegucigalpa pintan un panorama preocupante. En 2024, sólo el 40% de los niños de 12 meses han recibido la vacuna SRP, muy por debajo de la meta de 20,306 infantes, con sólo 8,089 vacunados.
La situación no mejora significativamente para los niños de 18 meses, donde sólo se ha logrado vacunar al 41% de los 20,306 esperados.
Esta tendencia se repite en otros grupos etarios, con cifras que revelan una deficiencia en la cobertura. La baja tasa de vacunación no es sólo un número, es un indicador del peligro inminente que enfrentan los niños.
¿Qué son las SRP?
El sarampión, la rubéola y la poliomielitis son enfermedades que, aunque prevenibles, pueden causar complicaciones graves e incluso la muerte.
La falta de inmunización pone en riesgo no solo a los no vacunados, sino también a toda la comunidad, comprometiendo la inmunidad colectiva.
La doctora María López, pediatra en el Distrito Central, comparte su preocupación: “Cada vez veo más padres que, por desinformación o miedo, deciden no vacunar a sus hijos. No entienden que las vacunas son seguras y necesarias para proteger a sus pequeños de enfermedades devastadoras”.
Por su parte, Carlos Méndez, padre de dos niños pequeños, confesó: “No sabía que las tasas de vacunación eran tan bajas. Pensé que estaba haciendo lo suficiente al llevar a mis hijos a la clínica, pero ahora me preocupa que muchos otros no lo estén haciendo”.
Cambios de dirección en la Región Metropolitana de Salud dañaron la vacunación
Entre los factores que contribuyen a esta alarmante situación destacan los continuos cambios administrativos en la Región Metropolitana de Salud, con tres administraciones diferentes en 2023, lo que ha dificultado la recopilación y gestión de datos.
Además, la desinformación y la desconfianza en las vacunas, alimentadas por rumores infundados, hacen que muchos padres retrasen o eviten la vacunación de sus hijos.
Claudia Salgado, madre de tres niños, comentó: “Ir a los centros de salud es una pérdida de tiempo, los doctores creen que uno anda jugando, y sobre la vacuna hasta hoy me entero porque usted me dijo”.
Es imperativo que las autoridades sanitarias de la capital del país tomen medidas urgentes para mejorar las tasas de vacunación.
Los padres, por su parte, deben asumir la responsabilidad de proteger a sus hijos, llevándolos a cualquiera de los 64 Centros Integrales de Salud (CIS) disponibles.
Es importante hacer de conocimiento público que los padres no deben pagar por las vacunas, las cuales son costosas, y en algunos casos solo deben presentar a sus hijos cuando los enfermeros de los CIS lleguen hasta la puerta de sus casas en las brigadas
Poliomielitis estuvo a un paso de Honduras
La poliomielitis, una enfermedad altamente contagiosa causada por un virus, sigue siendo una amenaza latente en América debido a la disminución en las tasas de vacunación.
Este virus ataca el sistema nervioso y puede causar parálisis en cuestión de horas.
Aunque América fue la primera región en ser declarada libre de polio en 1994 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), hoy enfrenta un riesgo de reintroducción del virus.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó en 2023 que en 33 de los 42 países de la región, la cobertura de inmunización con la tercera dosis de la vacuna contra la polio está por debajo del 95%.
Entre los países con niveles de vacunación preocupantes se encuentran Argentina, Bolivia, Brasil, México, Perú, Venezuela, Paraguay, Colombia, Haití y Perú.
Estas tasas de vacunación insuficientes ponen a estos países en mayor riesgo de reintroducción del virus
