Tegucigalpa, Honduras.- El amanecer de este viernes no fue resplandeciente para todos, los dueños de unos 250 puestos del mercado ubicado a inmediaciones del puente Carías despertaron con la terrible noticia de que su patrimonio estaba siendo consumido por las llamas.
El lamentable hecho se suscitó entre las dos y tres de la mañana, preliminarmente se reportó que 50 negocios fueron consumidos por completo. Puestos de ropa usada, abarrotería y de zapatos quedaron hechos cenizas, pero luego se confirmó que en la zona funcionan al menos 200 locales.
Pese a que en la capital caía una leve llovizna, todavía al filo de las cinco de la mañana, los miembros del cuerpo de bomberos seguían tratando de apagar las llamas.
“Quedamos en la calle, habíamos invertido, porque en esta época tenemos fe de que podamos ganar nuestro dinerito”, dijo una de las vendedoras que llegó a las cuatro de la mañana para ser testigo de cómo las llamas arrebataban el negocio que con tanto sacrificio mantenía.
Algunos de los locatarios pasaron la madrugada frente a sus negocios y compartieron sus desgarradores testimonios.
“Yo me lancé por una de las ventanas, yo estaba durmiendo cuando vi que una sombra negra andaba por los pasillos”, dijo un joven que pasó la noche en su local y logró salir a tiempo.
La tragedia ocurrió en uno de los meses más productivos para los vendedores. Para mediados de diciembre, la mayoría ya había invertido en productos con el anhelo de que la víspera navideña fuera de ganancias.
No obstante, hoy enfrentan una Navidad amarga, donde en sus pensamientos solo resuena cómo se van a recuperar de las pérdidas.
“Estamos endeudados, habíamos invertido”, dijo una de las primeras vendedoras que llegó al lugar.