CHOLUTECA, HONDURAS.-La noche caía sobre las
playas de sur de Honduras y decenas de
tortugas golfinas se arrastraban por la arena para iniciar e
l ritual de vida.
Después de un largo recorrido lejos del mar, con sus aletas dibujaban un círculo sobre la arena volcánica para que sus huevos quedaran cubiertos, mientras los pobladores e integrantes del comité de protección esperaban para poder recolectarlos y llevarlos a los refugios.
Escondida entre manglares está la playa El Edén, a dos kilómetros de Cedeño, donde se encuentra uno de los principales albergues.
La zona, señalizada por dos rótulos, invitaba a observar el procedimiento de veda (prohibición de consumo de huevos), que se realiza después de esconder los óvulos en pequeños agujeros sobre la tierra. Al costado, un cartel indica la fecha de desovación y de nacimiento de los reptiles, que deberá ser en 45 días a partir del 1 de septiembre.
El espacio, protegido por una malla metálica, era custodiado por dos miembros de las Fuerzas Armadas, quienes según indicaron, su deber era evitar que los huevos fueran dañados o robados.
En los agujeros habían 1,700 huevos de tortuga golfina, que estaban soterrados, mientras que la temperatura en el lugar llegaba a los 34 grados centígrados.
Una tortuga cuando realiza su proceso de desovación en una playa del sur de Honduras.
Cada año pueden llegar a nacer hasta 45 mil tortugas golfinas, que después de romper el cascarón intentan regresar al mar, pero en algunos casos son cuidadas en los albergues hasta por tres meses, para garantizar que sigan viviendo.
Multas
En nuestro recorrido por las calles del sur consultamos sobre el proceso de la veda; para nuestra sorpresa las personas reaccionaron con aceptación y al mismo tiempo con un poco de temor.
“Mejor uno ni los toca porque lo multan”, dijo una joven vendedora, mientras partía un coco que comprábamos por el calor.
Y es que las autoridades se han tomado la protección de estos reptibles de forma muy detallada, pues si una persona es detenida con huevos de tortuga deberá pagar una multa de hasta 50,000 lempiras o de lo contrario una condena en prisión.
Los sureños saben que desde el 1 de septiembre hasta el 15 de octubre la vida de las tortugas golfinas se protege, mientras la luz del día sale para poder ser liberadas.
Después de un largo recorrido lejos del mar, con sus aletas dibujaban un círculo sobre la arena volcánica para que sus huevos quedaran cubiertos, mientras los pobladores e integrantes del comité de protección esperaban para poder recolectarlos y llevarlos a los refugios.
Escondida entre manglares está la playa El Edén, a dos kilómetros de Cedeño, donde se encuentra uno de los principales albergues.
La zona, señalizada por dos rótulos, invitaba a observar el procedimiento de veda (prohibición de consumo de huevos), que se realiza después de esconder los óvulos en pequeños agujeros sobre la tierra. Al costado, un cartel indica la fecha de desovación y de nacimiento de los reptiles, que deberá ser en 45 días a partir del 1 de septiembre.
El espacio, protegido por una malla metálica, era custodiado por dos miembros de las Fuerzas Armadas, quienes según indicaron, su deber era evitar que los huevos fueran dañados o robados.
En los agujeros habían 1,700 huevos de tortuga golfina, que estaban soterrados, mientras que la temperatura en el lugar llegaba a los 34 grados centígrados.
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En la zona existen cinco campamentos permanentes ubicados en las playas de Punta Condega, Cedeño, Carretales, La Boca del Río Viejo y Punta Ratón, que a su vez se subdividen en Playas Doradas, El Edén, Cedeño centro y Los Delgaditos.
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Cada año pueden llegar a nacer hasta 45 mil tortugas golfinas, que después de romper el cascarón intentan regresar al mar, pero en algunos casos son cuidadas en los albergues hasta por tres meses, para garantizar que sigan viviendo.
Multas
En nuestro recorrido por las calles del sur consultamos sobre el proceso de la veda; para nuestra sorpresa las personas reaccionaron con aceptación y al mismo tiempo con un poco de temor.
“Mejor uno ni los toca porque lo multan”, dijo una joven vendedora, mientras partía un coco que comprábamos por el calor.
Y es que las autoridades se han tomado la protección de estos reptibles de forma muy detallada, pues si una persona es detenida con huevos de tortuga deberá pagar una multa de hasta 50,000 lempiras o de lo contrario una condena en prisión.
Los sureños saben que desde el 1 de septiembre hasta el 15 de octubre la vida de las tortugas golfinas se protege, mientras la luz del día sale para poder ser liberadas.
