Tegucigalpa, Honduras.- Los perros son mucho más que mascotas; son compañeros de vida que nos llenan de amor y alegría. Por eso, es natural que nos preguntemos cuántos años podrán acompañarnos y cómo podemos ayudarlos a vivir más y mejor.
Primero hay que entender que la esperanza de vida de un perro depende de varios factores, como la raza, el tamaño, la genética y los cuidados que reciba a lo largo de su vida. Aquí el detalle.
Uno de los factores más determinantes en la longevidad de un perro es su raza. En general, los pequeños tienden a vivir más que los grandes.
Por ejemplo, los chihuahuas y los caniches pueden superar los 15 años, mientras que los gran danés o mastín suelen tener una esperanza de vida menor, en torno a los 7-10 años.
Este fenómeno se debe a que los perros grandes envejecen más rápido y tienen mayor predisposición a ciertas enfermedades, como problemas cardíacos o displasia de cadera.
Sin embargo, hay excepciones, y algunos canes de razas grandes han alcanzado edades avanzadas gracias a buenos cuidados y una genética favorable.
La ciencia ha avanzado mucho en el estudio de la longevidad de los perros. Algunos estudios recientes han analizado el impacto de la alimentación, el ejercicio y los controles veterinarios en la esperanza de vida canina.
Se ha descubierto que una dieta equilibrada, el control del peso y la actividad física moderada pueden prolongarles y mejorarles la vida. Por supuesto, el amor y la atención que reciben en sus hogares será determinante en cada caso.

¿Cómo ayudarlos a vivir más tiempo?
Si bien cada perro es único, lo más importante es brindarles amor, atención y una vida saludable para que puedan disfrutar al máximo de su vida, y usted de su compañía.
Buena alimentación. Ofrecer una dieta balanceada y adecuada para su edad y tamaño es directamente incidente en su estado de salud. Procure invertir en alimentos de calidad.
Ejercicio moderado. Mantener una rutina de actividad física adaptada a sus necesidades y capacidades es esencial para que el perro mejore su resistencia, músculos y fuerza.
Bienestar integral
Controles veterinarios. Atender los chequeos veterinarios en tiempo y forma, que deben ser en promedio cada tres meses, es clave para detectar y prevenir enfermedades a tiempo.
Cuidado dental. Muchos ignoran o menosprecian el hecho de que la salud bucal influye en el bienestar general del perro. Busque asesoría especializada y atienda el caso.
Ambiente libre de estrés. Un hogar tranquilo y cariñoso favorece el bienestar emocional de sus mascotas. No haga parte de entornos en los que predominen el estrés y la hostilidad.