TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Las autoridades sanitarias han alertado sobre la variante Pirola, una subvariante de la Ómicron que fue registrada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una “variante de interés” debido a su alta contagiosidad y la cantidad de mutaciones que presenta.
Aunque todavía hay poca información sobre esta variante, las autoridades sanitarias aseguran que no reviste gravedad. Sin embargo, las probabilidades de contagio están relacionadas con la condición inmunológica de la persona y si está vacunada o no.
La variante Pirola se ha extendido por todo el mundo, especialmente en China y Estados Unidos. También se han detectado casos en España a través de aguas residuales.
A pesar de esto, los síntomas manifestados por esta variante no difieren mucho de las variantes anteriores y son menos severos que en los inicios de la pandemia en 2020.
Síntomas de Pirola
Los síntomas más comunes de la variante Pirola son dolor de garganta, tos, dolor de cabeza, congestión, estornudos, afonía, dolores musculares, fiebre y pérdida de olfato.
Sin embargo, la tos seca y la pérdida de olfato son menos comunes en comparación con otras variantes. También se han registrado casos graves con dificultad para respirar, dolor en el pecho y extremidades pálidas o azuladas por la falta de oxígeno.
La variante Pirola se transmite de la misma manera que otras variantes de COVID-19, a través de las gotitas que las personas infectadas desprenden al hablar, toser o estornudar. Su duración estimada, sin complicaciones, es de cinco a siete días.
A pesar del aumento de casos, la propagación de la variante Pirola se está controlando gracias a la vacunación de la población. La OMS brinda tranquilidad a la población mundial, ya que las vacunas contra el COVID también protegen contra los efectos de esta variante.
Según las autoridades sanitarias crucial resaltar la importancia de la vacunación para reducir no solo el riesgo de infección, sino también la gravedad y mortalidad de la enfermedad.
Según refieren, las vacunas han demostrado ser una herramienta vital en el control de la pandemia, protegiendo a muchas personas y reduciendo la transmisión del virus. Además, esta reducción de casos también alivia la presión sobre los sistemas de salud, permitiendo brindar atención a pacientes con otras enfermedades sin dificultad.
A pesar de la presencia de la variante Pirola en varios países, las autoridades sanitarias hacen hincapié en la eficacia de las vacunas y la importancia de seguir las recomendaciones de prevención, como el uso de mascarillas, el lavado de manos frecuente y el distanciamiento social.
La OMS aseguró que continuará monitoreando de cerca la variante Pirola y proporcionando actualizaciones y directrices a medida que se disponga de más información sobre esta subvariante de la Ómicron.