TEGUCIGALPA, HONDURAS-. Desde su fundación en la ciudad de Beaumont, Texas, Texas Fuel Company, hoy conocida como TEXACO, se fue estableciendo como una marca de combustible líder de la industria. Hoy, 120 años después, Texaco continúa avanzando en su legado ayudando a los consumidores a llegar más lejos, lema que les ha distinguido a través de su historia.
La estrella icónica que representa a TEXACO, ha acompañado por generaciones a los conductores y ha recorrido un sin número de caminos ayudándoles a mantener el motor de sus vehículos limpio para así mejorar su desempeño a lo largo de su trayecto de trabajo, diversión, actividades familiares y aventuras.
Un viaje por la Memoria con Texaco
La estrella ha nacido
Texaco nació en Texas, Estados Unidos, como Texas Company; pero, debido a su abreviatura en el uso de los telegramas de la época, la empresa pasó a ser conocida como TEXACO y dos años después, el símbolo de la estrella fue incorporado como imagen de la marca. Este símbolo fue propuesto por uno de los trabajadores de la refinería, de origen italiano, que propuso abrazar el símbolo con las 5 puntas en referencia al estado de Texas, utilizando el color verde para la letra T, color que probablemente eligió de la bandera italiana.
Crecimiento y desarrollo
A lo largo del tiempo, el logotipo tuvo algunos cambios subjetivos, además al portafolio de productos de la empresa se incorporaron nuevas marcas tales como Havoline Oil, cuando TEXACO adquirió la Indian Refining Company en 1931, marcando así un hito en cuanto a servicio, pues estos productos fueron muy innovadores frente a los que en ese entonces se ofrecían.
Compromiso y trayectoria
Conforme la empresa fue creciendo, también aumentó su compromiso hacia el desempeño y la optimización de los motores. Y en cuanto a imagen, para el año 1959 el nombre comercial de TEXACO se convirtió en el nombre oficial de la corporación.
La década de los 60 representó grandes cambios en el mundo; sin embargo, los conductores tenían la certeza que podían contar con Texaco, por lo que la frase “Confía tu carro al hombre que lleva la estrella” se convirtió en el eslogan de la campaña de publicidad que fue lanzada en 1962 y la versión hexagonal del logotipo fue introducida en 1963; ambos se convirtieron en un ícono de confianza y seguridad en el camino para una generación entera.
En el año 2001, las marcas Texaco y Chevron se fusionaron y se convirtieron en la compañía Chevron Texaco. Hoy, la estrella de Texaco brilla en más de 180 países.