El derbi capitalino Motagua-Olimpia celebrado el domingo 2 de abril continúa dejando secuelas de violencia, tragedia y misterio.
Todo parecía que el oscuro episodio protagonizado entre las barras y policías -esa soleada tarde en las afueras del Estadio Nacional Tiburcio Carias Andino -quedaría en el recuerdo y de lección para las autoridades y los mismos integrantes de estos grupos de aficionados.
Sin embargo, este jueves una madre desesperada y con lágrimas en sus ojos llegó hasta las instalaciones del Core 7 en la capital de Honduras en busca de su hijo, quien se encuentra desaparecido desde el domingo.
La señora Carmen Inés García Martínez relató que su muchacho de nombre Josúe Ignacio Ordoñez García, de 17 años y residente de Siguatepeque, vino a Tegucigalpa para presenciar dicho encuentro deportivo.
Sin embargo, cabe recordar que previo al encuentro, las barras Revolucionarios y Ultra Fiel se enfrentraron a las afueras del coloso capitalino.
Ante esta acción, miembros de la Policía Nacional se involucraron lanzando bombas lacrimogénas lo que hizo que algunos aficionados se fueran encima de los uniformado, creando un salvaje enfrentamiento.
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Según la acongojada mujer, su vástago la llamó -desde el telefóno de un militar- y le informó que había sido detenido y posteriormente subido a una patrulla de la Policía Militar.
'Mami vení mañana temprano', fue lo último que escuchó su madre. La señora viajó hasta el miércoles por falta de recursos económicos, pero para su mala suerte no lo encontró y su paradero es un misterio.
La angustiada dama exige una explicación ya que en los registros del Core no aparece el nombre de hijo entre los detenidos de aquel domingo.
García Martínez dijo que ya ha buscado a su hijo en los hospitales, postas y hasta en la morgue, pero nadie le informa sobre su paradero.
Mientras tanto, autoridades tampoco dan cuenta de pistas o investigaciones respecto a este caso que nuevamente tiene desesperada a una familia.
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Honduras, el país de los policías que pierden una pistola de reglamento a manos de una barra (el 7 de abril de 2014 en una pelea con la Ultra Fiel en el Nacional) y el país del hincha que traspasa cinco anillos de seguridad como cualquier hijo de vecino para marcar un gol
El 5 de febrero de 2017, un seguidor de Olimpia se metió al campo y “empató” el Olimpia-Motagua de la primera vuelta. ahora también es el país de los policías que rechazan una agresión con piedras, las mismas piedras que lanzaba un grupo de ultras olimpistas que protagonizaban un combate con la autoridad antes de iniciar el clásico del domingo.
Y como el tema se vuelve recurrente, las respuestas también. En mayo de 2015, el Congreso Nacional aprobó los artículos de la Ley Especial para la Prevención de la Violencia en los Estadios, pero hasta hoy los incidentes en la Liga Nacional no cesan, por más que el 25 de junio de 2016 la Asamblea Ordinaria de la LNP decidiera que ninguna barra visitante ingresaría a los partidos del Torneo Clausura.
