JUTICALPA, OLANCHO.- “Tocá por bajo, andá, presionalo”, se escuchan las directrices desde el banquillo. Así pretende ser el nuevo
Juticalpa de Robert Lima.
Con una semana al mando y mientras le va dando forma a su cuadrilla, el exdefensa de Olimpia ya le dejó claro a sus muchachos cuál será la filosofía. Y ellos ya la tienen clara, incluido el nuevo del equipo: el exportero de UPNFM, Mariano Pineda.
“Es un técnico muy exigente, que le gusta jugar a ras de piso, hacer los entrenamientos con mucha intensidad y que se presione arriba. Uno en el país está acostumbrado a tirar la pelota y él trae otro concepto de juego”, dijo el cancerbero, el único refuerzo hasta ahora.
-Son siete bajas-
La llegada del meta contrasta con las siete bajas ( Brayan García, Maylor Núñez, James Cabezas, Israel Fonseca, Jorge Zaldívar, Osman Melgares y Franco Güity).
Pero mientras llegan los fichaje (buscan dos centro delanteros, un lateral y un extremo), el equipo entrena al ritmo elevado que exige el entrenador uruguayo. “Son pocos los técnicos que juegan con la filosofía que trae el profe; en el país solo lo hace el España, Primi y los equipos de Restrepo. A uno como jugador y al aficionado es lo que nos gusta”.
La palabra de Pineda es compartida por el carrilero Bryan Ramírez. “El profe viene con esa metodología de tocar el balón, no le gusta el pelotazo. Viene con otro modelo de juego, que implica la presión alta y no achicarnos”.
Y es que la situación en el Canechero no está para relajaciones. Tras el nefasto Apertura, el orgullo de Olancho arrancará el decisivo Clausura con solo cuatro puntos por encima del descenso (Real de Minas).
“Será un torneo bien apretado para nosotros”, dijo Ramírez, en tanto que Hilder Colón reconoció que “uno se siente incómodo porque a nadie le gusta estar abajo, pero el equipo se está formando bien”.
-Se piensa en ser protagonista-
Luego de haber sido el segundo peor equipo del torneo (solo tres triunfos y 34 goles encajados), los juticalpenses saben que deben jugar con el cuchillo entre los dientes. La prioridad llama a evitar el descenso, pero la ambición demanda a pensar en grande.
“Todo es escalón por escalón, lo primero es salvar el equipo del descenso, pero yo vengo con aspiraciones de estar en una liguilla. Hay equipo y una afición que apoya, vamos a tratar de traer la gente al estadio, haciendo buenos espectáculos y ganando”, dijo el meta Pineda, tras el entrenamiento en el Estadio Juan Ramón Vargas.
Ni la lluvia ni el frío matutino, nada mermó la intensidad que pide un entrenador que solicita a sus jugadores llegar una hora antes del entrenamiento. La disciplina será clave.
“El profe ha venido con buenos ánimos, ha caído muy bien en el plantel y seguramente hará las cosas de la mejor manera”, dijo la Gata, uno de los criollos de este nuevo Canechero de Robert Lima.
Con una semana al mando y mientras le va dando forma a su cuadrilla, el exdefensa de Olimpia ya le dejó claro a sus muchachos cuál será la filosofía. Y ellos ya la tienen clara, incluido el nuevo del equipo: el exportero de UPNFM, Mariano Pineda.
“Es un técnico muy exigente, que le gusta jugar a ras de piso, hacer los entrenamientos con mucha intensidad y que se presione arriba. Uno en el país está acostumbrado a tirar la pelota y él trae otro concepto de juego”, dijo el cancerbero, el único refuerzo hasta ahora.
-Son siete bajas-
La llegada del meta contrasta con las siete bajas ( Brayan García, Maylor Núñez, James Cabezas, Israel Fonseca, Jorge Zaldívar, Osman Melgares y Franco Güity).
Pero mientras llegan los fichaje (buscan dos centro delanteros, un lateral y un extremo), el equipo entrena al ritmo elevado que exige el entrenador uruguayo. “Son pocos los técnicos que juegan con la filosofía que trae el profe; en el país solo lo hace el España, Primi y los equipos de Restrepo. A uno como jugador y al aficionado es lo que nos gusta”.
La palabra de Pineda es compartida por el carrilero Bryan Ramírez. “El profe viene con esa metodología de tocar el balón, no le gusta el pelotazo. Viene con otro modelo de juego, que implica la presión alta y no achicarnos”.
Y es que la situación en el Canechero no está para relajaciones. Tras el nefasto Apertura, el orgullo de Olancho arrancará el decisivo Clausura con solo cuatro puntos por encima del descenso (Real de Minas).
“Será un torneo bien apretado para nosotros”, dijo Ramírez, en tanto que Hilder Colón reconoció que “uno se siente incómodo porque a nadie le gusta estar abajo, pero el equipo se está formando bien”.
-Se piensa en ser protagonista-
Luego de haber sido el segundo peor equipo del torneo (solo tres triunfos y 34 goles encajados), los juticalpenses saben que deben jugar con el cuchillo entre los dientes. La prioridad llama a evitar el descenso, pero la ambición demanda a pensar en grande.
“Todo es escalón por escalón, lo primero es salvar el equipo del descenso, pero yo vengo con aspiraciones de estar en una liguilla. Hay equipo y una afición que apoya, vamos a tratar de traer la gente al estadio, haciendo buenos espectáculos y ganando”, dijo el meta Pineda, tras el entrenamiento en el Estadio Juan Ramón Vargas.
Ni la lluvia ni el frío matutino, nada mermó la intensidad que pide un entrenador que solicita a sus jugadores llegar una hora antes del entrenamiento. La disciplina será clave.
“El profe ha venido con buenos ánimos, ha caído muy bien en el plantel y seguramente hará las cosas de la mejor manera”, dijo la Gata, uno de los criollos de este nuevo Canechero de Robert Lima.