El Barça estaba muy presionado, después de encadenar dos empates y de quedar descolgado en la clasificación respecto a su eterno rival.
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El Real Madrid jugó antes este domingo y su triunfo en Bilbao le puso provisionalmente con siete puntos más, lo que dejaba contra las cuerdas al equipo azulgrana, que pudo al menos seguir conservando la esperanza.
Ya en el minuto 3, el Barça se adelantó en el marcador por un tanto en contra de Pau Torres, pero el Villarreal igualó en el 11 por medio de Gerard Moreno.
El uruguayo Luis Suárez (20) y el francés Antoine Griezmann (45) pusieron al Barça por delante con sendos disparos desde la frontal del área, en ambos casos tras asistencias de Lionel Messi.
El astro argentino tuvo que conformarse con ese papel de pasador. En el 69, el VAR anuló un tanto suyo por fuera de juego de Arturo Vidal.
Ansu Fati, en el 87 con un tiro raso, rubricó la goleada de los catalanes en el Estadio de la Cerámica.
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La victoria permite al Barça calmar los ánimos, en una semana en la que se llegó incluso a especular con el deseo de Messi de no renovar, pero el Real Madrid sigue teniendo el título de Liga todavía más cerca tras ganar 1-0 en Bilbao ante el Athletic.
Por tercera vez desde la reanudación del campeonato el 11 de junio, los madrileños ganaron gracias a un gol de penal de su capitán Sergio Ramos (minuto 73), autor de su décimo tanto en Liga.
Dani García estiró la pierna y pisó a Marcelo, que se quedó en el suelo. En un primer momento el árbitro no consideró penal, pero el VAR le avisó y después de que acudiera a repasar la jugada al monitor, castigó la jugada. Penal, gol y tres puntos para los blancos.
A cuatro partidos para finalizar, el gigante blanco parece quedar a un paso de su 34º título de Liga.
