LISBOA, PORTUGAL.- La
histórica final de la Liga de Campeones 2020, un curso marcado para siempre por la
pandemia del nuevo coronavirus, enfrenta este domingo en
Lisboa al
París Saint-Germain de Neymar y Kylian Mbappé con el
Bayern Múnich de la máquina de golear Robert Lewandowski.
El cierre de la competición de clubes más importante del mundo será histórico porque se supo reinventar sobre la marcha y tras el parón del fútbol europeo por la pandemia se comprimió en una 'Final 8' en Lisboa, a puerta cerrada y a partido único desde cuartos. PSG y Bayern son los supervivientes.
Los franceses, que entraron en una nueva era en la última década con la llegada de sus propietarios cataríes, debutan en un partido por el título, mientras que el gigante alemán buscará su sexto título.
El silencio el Estadio de La Luz, sin los 65,000 espectadores que podrían llenarlo, dictará sentencia.
'Es verdad que será raro jugar a puerta cerrada. Nos gustaría tener a nuestros hinchas pero sé que nos estarán apoyando. Esto es la Liga de Campeones', señaló Mbappé este sábado en una rueda de prensa virtual.
La competición estuvo suspendida cinco meses, entre marzo y principios de agosto, cuando se retomó con las cuatro vueltas de octavos que habían quedado sin jugarse.
'Sientes toda la presión. Todo el mundo quiere ganar, especialmente con este inusual formato. Todo el mundo lo recordará mucho tiempo por los trágicos acontecimientos que la han rodeado', añadió el campeón del mundo con Francia en 2018.
El partido promete emociones fuertes entre dos equipos acostumbrados a ganar en la escena nacional y que vencieron con rotundidad en semifinales. El Bayern Múnich mantendrá su presión alta y defensa adelantada, mientras que el PSG intentará que sus estrellas Neymar y Mbappé aprovechen los espacios.
Será el primer representante del fútbol francés en la final de Champions desde que el Mónaco cayó en 2004 ante el Oporto de José Mourinho. En caso de levantar el trofeo, el PSG sería el segundo club francés en proclamarse campeón de Europa, un honor que hasta ahora solo ha disfrutado el Marsella en 1993.
'Es la misión que tenía cuando firmé con este equipo. Sería un gran premio', comentó Mbappé, que puede ahora lograr otro gran título. 'Siempre he dicho que quería hacer historia para mi país', señaló.
Si el París Saint-Germain es uno de los estandartes de los clubes 'nuevos ricos', que han experimentado una progresión a golpe de talonario mediante propietarios venidos de otros países, el Bayern Múnich representa la tradición y la historia.
Es un equipo acostumbrado a las finales. Ha sido cinco veces campeón de Europa, la última en 2013.
Desde hace semanas, el conjunto muniqués se perfila como el favorito a ser campeón en este torneo.
Dominó claramente su semifinal (3-0 al Lyon) y asombró al mundo entero en cuartos de final con un histórico 8-2 contra el Barcelona. En la fase de grupos endosó otra goleada de escándalo, por 7-2, al Tottenham, subcampeón del torneo el curso pasado.
Tras conquistar la Bundesliga y la Copa de Alemania, levantar la 'Orejona' supondría un triplete memorable para el equipo de Hansi Flick.
'Sabemos evidentemente que el PSG tiene jugadores muy rápidos, pero en los diez últimos meses hemos impuesto nuestra filosofía, la fuerte presión es la garantía de nuestro éxito, no vamos a cambiar gran cosa', aseguró su técnico, Hansi Flick, negando el sábado que vaya a adaptar su filosofía o su juego a Neymar o Kylian Mbappé.
Para el técnico alemán del PSG, Thomas Tuchel, el Bayern tiene una 'pequeña ventaja' porque es un club 'acostumbrado a jugar partidos así'.
Marco Verratti está 'disponible' para jugar y el interrogante de Tuchel está en la portería, con Keylor Navas en duda por la lesión en un muslo que le privó de jugar en semifinales. Sergio Rico sería su sustituto si el costarricense no puede jugar finalmente.
El cierre de la competición de clubes más importante del mundo será histórico porque se supo reinventar sobre la marcha y tras el parón del fútbol europeo por la pandemia se comprimió en una 'Final 8' en Lisboa, a puerta cerrada y a partido único desde cuartos. PSG y Bayern son los supervivientes.
Los franceses, que entraron en una nueva era en la última década con la llegada de sus propietarios cataríes, debutan en un partido por el título, mientras que el gigante alemán buscará su sexto título.
El silencio el Estadio de La Luz, sin los 65,000 espectadores que podrían llenarlo, dictará sentencia.
'Es verdad que será raro jugar a puerta cerrada. Nos gustaría tener a nuestros hinchas pero sé que nos estarán apoyando. Esto es la Liga de Campeones', señaló Mbappé este sábado en una rueda de prensa virtual.
La competición estuvo suspendida cinco meses, entre marzo y principios de agosto, cuando se retomó con las cuatro vueltas de octavos que habían quedado sin jugarse.
'Sientes toda la presión. Todo el mundo quiere ganar, especialmente con este inusual formato. Todo el mundo lo recordará mucho tiempo por los trágicos acontecimientos que la han rodeado', añadió el campeón del mundo con Francia en 2018.
El partido promete emociones fuertes entre dos equipos acostumbrados a ganar en la escena nacional y que vencieron con rotundidad en semifinales. El Bayern Múnich mantendrá su presión alta y defensa adelantada, mientras que el PSG intentará que sus estrellas Neymar y Mbappé aprovechen los espacios.
'Hacer historia'
El PSG consiguió plaza para la primera final de la Liga de Campeones de su historia tras derrotar al RB Leipzig por 3-0, el martes en semifinales.Será el primer representante del fútbol francés en la final de Champions desde que el Mónaco cayó en 2004 ante el Oporto de José Mourinho. En caso de levantar el trofeo, el PSG sería el segundo club francés en proclamarse campeón de Europa, un honor que hasta ahora solo ha disfrutado el Marsella en 1993.
'Es la misión que tenía cuando firmé con este equipo. Sería un gran premio', comentó Mbappé, que puede ahora lograr otro gran título. 'Siempre he dicho que quería hacer historia para mi país', señaló.
Si el París Saint-Germain es uno de los estandartes de los clubes 'nuevos ricos', que han experimentado una progresión a golpe de talonario mediante propietarios venidos de otros países, el Bayern Múnich representa la tradición y la historia.
Es un equipo acostumbrado a las finales. Ha sido cinco veces campeón de Europa, la última en 2013.
Desde hace semanas, el conjunto muniqués se perfila como el favorito a ser campeón en este torneo.
Dominó claramente su semifinal (3-0 al Lyon) y asombró al mundo entero en cuartos de final con un histórico 8-2 contra el Barcelona. En la fase de grupos endosó otra goleada de escándalo, por 7-2, al Tottenham, subcampeón del torneo el curso pasado.
Tras conquistar la Bundesliga y la Copa de Alemania, levantar la 'Orejona' supondría un triplete memorable para el equipo de Hansi Flick.
'Pequeña ventaja' del Bayern
Robert Lewandowski, el artillero polaco del Bayern, está muy inspirado esta temporada y el conjunto bávaro ha dado sobradas muestras de su personalidad.'Sabemos evidentemente que el PSG tiene jugadores muy rápidos, pero en los diez últimos meses hemos impuesto nuestra filosofía, la fuerte presión es la garantía de nuestro éxito, no vamos a cambiar gran cosa', aseguró su técnico, Hansi Flick, negando el sábado que vaya a adaptar su filosofía o su juego a Neymar o Kylian Mbappé.
Para el técnico alemán del PSG, Thomas Tuchel, el Bayern tiene una 'pequeña ventaja' porque es un club 'acostumbrado a jugar partidos así'.
Marco Verratti está 'disponible' para jugar y el interrogante de Tuchel está en la portería, con Keylor Navas en duda por la lesión en un muslo que le privó de jugar en semifinales. Sergio Rico sería su sustituto si el costarricense no puede jugar finalmente.