TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Gracias a los ciclistas, patrocinadores y staff de
EL HERALDO, el reto
Strava de los 100 kilómetros a favor de la
Asociación Hondureña del Teléfono de la Esperanza fue un éxito.
La participación de los pedalistas en esta décima edición fue vital para hacer de esta visión una realidad, tanto así que a través de sus bicicletas en tan solo una semana elevaron el nivel de este desafío.
Porque los reyes del asfalto no solo participaron pedaleando sino que también realizaron su aporte económico para la fundación; así, llevaron con sus bicicletas un mensaje de solidaridad a todos los rincones de Honduras y al exterior.
En sus recorridos, aparte de sumar cadencia para completar la meta de los 100 kilómetros, mantuvieron en mente la existencia de problemas de toda índole que abaten a los hondureños: la decadencia de la salud emocional y física, así como también el irrespeto vial.
Además, a través de esta edición virtual de la Vuelta EL HERALDO se brindó un homenaje a todos esos ciclistas que perdieron la vida en trágicos accidentes con la famosa bici de color blanco que atravesó la ruta de los competidores.
Fue una verdadera travesía de norte a sur, de este a oeste, de oriente a occidente. Islas de la Bahía, Cortés, Olancho, Choluteca y el grueso de Francisco Morazán también le dieron pasada a los participantes extrafronteras: Guatemala, Belice, Nicaragua, Estados Unidos e incluso Vietnam dijeron presente. ¡Gracias a todos y a todas por ser parte de este gran sueño!
La participación de los pedalistas en esta décima edición fue vital para hacer de esta visión una realidad, tanto así que a través de sus bicicletas en tan solo una semana elevaron el nivel de este desafío.
Porque los reyes del asfalto no solo participaron pedaleando sino que también realizaron su aporte económico para la fundación; así, llevaron con sus bicicletas un mensaje de solidaridad a todos los rincones de Honduras y al exterior.
En sus recorridos, aparte de sumar cadencia para completar la meta de los 100 kilómetros, mantuvieron en mente la existencia de problemas de toda índole que abaten a los hondureños: la decadencia de la salud emocional y física, así como también el irrespeto vial.
Además, a través de esta edición virtual de la Vuelta EL HERALDO se brindó un homenaje a todos esos ciclistas que perdieron la vida en trágicos accidentes con la famosa bici de color blanco que atravesó la ruta de los competidores.
Fue una verdadera travesía de norte a sur, de este a oeste, de oriente a occidente. Islas de la Bahía, Cortés, Olancho, Choluteca y el grueso de Francisco Morazán también le dieron pasada a los participantes extrafronteras: Guatemala, Belice, Nicaragua, Estados Unidos e incluso Vietnam dijeron presente. ¡Gracias a todos y a todas por ser parte de este gran sueño!