Tegucigalpa, Honduras.- Faltando poco más de una hora con 20 minutos, llegó Motagua al Estadio Nacional para la gran final ante Olimpia, serie que dejó un 1-1 en la ida.
El conjunto azul esta vez no llegó en buses coaster y optaron por hacerlo en uno ejecutivo que transportó a todo el plantel.
El último que bajó del bus fue Diego Vázquez, vestido totalmente de negro y con su saco, del mismo color, en su mano izquierda.
Sin embargo, Vázquez causó curiosidad porque cargaba una bolsa de bananos, algo que nunca había hecho en las finales que ha dirigido al mando de Motagua.
Lo que más llamó la atención es que era una fruta que perfectamente pudo haber sido llevada por alguien más del equipo, pero fue el técnico quien las trasladó.
Estas frutas son para ser comidas por los futbolistas durante el juego pactado para las 6:00 p.m. en el Estadio Nacional de Tegucigalpa.
¿Por qué? Porque sirven para prevenir los calambres musculares al ser una fruta que contiene potasio, un mineral que ayuda a regular la función muscular y nerviosa.
Además, el banano también contiene magnesio, hierro y vitaminas C y B6, que pueden ayudar a aliviar el malestar de las contracciones musculares.
Durante las más de 10 finales que ha dirigido Diego Vázquez con Motagua, entre torneo nacional e internacional, ha mostrado varias cábalas como pasar al lado del banderín de esquina o usar la misma ropa.
Cargar una bolsa de bananos previo a una final es algo que nunca se le había visto en los 10 años que lleva dirigiendo.