ROMA, ITALIA.- La
Juventus dejó escapar la primera ocasión para conquistar su noveno
'Scudetto' consecutivo al perder por 2-1 este jueves contra el
Udinese (15º), en partido de la
35ª jornada de la Serie A.
Después del empate del Inter el miércoles ante la Fiorentina, todo estaba planeado para que la Juventus conquistase el título, para lo cual necesitaba la victoria en su visita a Udine.
Más claro parecía aún cuando el central holandés Matthijs de Ligt adelantó al equipo piamontés poco antes del descanso con un potente derechazo desde fuera del área (42).
Pero el Udinese fue capaz de voltear el marcador en el segundo tiempo ante una Juventus que sigue dando muestras de debilidad desde que se reanudó el 'Calcio' en junio.
Los locales empataron el partido con un cabezazo del macedonio Ilija Nestorovski (52) y se llevaron los tres puntos en el descuento con una magistral contra del senegalés Seko Fofana (90+2).
'Hemos pagado la falta de orden después de una buena primera parte', resumió el técnico juventino Maurizio Sarri.
'Quisimos ganar a toda costa, estuvimos desordenados, llevamos el partido a una deriva peligrosa y lo acabamos perdiendo en el minuto 93 porque queríamos ganarlo', añadió.
'A estas alturas de temporada es difícil, estamos todos cansados. Hemos perdido agresividad', señaló.
Pese a la derrota, la Juventus tendrá una nueva oportunidad de proclamarse campeón, el próximo domingo, en casa, frente a la Sampdoria.
Incluso lo podría lograr el sábado, viéndolo por la televisión, dependiendo de los resultados del Atalanta (2º) e Inter (3º).
Pero más allá de la anécdota del campeonato italiano, que la Juventus ganará salvo catástrofe, el equipo piamontés sigue dando muestras de que no está en su mejor momento, cuando quedan poco más de dos semanas para el trascendental duelo de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Lyon, en el que los 'Bianconeri' deben remontar el 1-0 encajado en la ida.
Pese al susto inicial que dio Daniele Rugani a su propio equipo, cuando el defensor de la Juve estuvo a punto de enviar la pelota al fondo de su arco al intentar rechazar un centro rival, la Juventus fue dueña del juego en la primera parte.
Amenazó en un par de ocasiones Cristiano Ronaldo (13 y 26), que busca sumar la mayor cantidad de goles posible para acabar como máximo goleador de la Serie A y Bota de Oro europeo, y el argentino Paulo Dybala tampoco acertó a batir a su compatriota Juan Musso con un disparo desde 20 m que acertó a desviar el cotizado arquero del Udinese.
Finalmente fue De Ligt el que abrió el marcador antes de la pausa, con potente derechazo desde fuera del área (42).
El equipo turinés parecía que con ese gol podría ser ya campeón este mismo jueves, pero el Udinese quiso dar un poco de suspense al campeonato italiano y al poco de reanudarse el partido en el segundo tiempo logró el empate.
El sueco Ken Sema centró desde la izquierda y el macedonio Ilija Nestorovski, libre de marca en el segundo palo, batió al polaco Wojciech Szczesny con un cabezazo en plancha (52).
Ese gol encajado pareció afectar más de lo que debería a una Juventus que ha dado muestras de flaqueza: el equipo que entrena Maurizio Sarri no sólo se mostró incapaz de crear juego, confundiendo velocidad con precipitación, y mucho menos ocasiones de gol, sino que en algunos momentos el Udinese mostró más peligro que el líder del campeonato.
Y el equipo de Udine vio recompensado su esfuerzo en el descuento, cuando el senegalés Seko Fofana ejecutó de manera magistral una contra vertiginosa: superó en velocidad y potencia a Alex Sandro, rompió la cintura de De Ligt para entrar en el área y superó por bajo la salida de Szczesny (90+2).
Después del empate del Inter el miércoles ante la Fiorentina, todo estaba planeado para que la Juventus conquistase el título, para lo cual necesitaba la victoria en su visita a Udine.
Más claro parecía aún cuando el central holandés Matthijs de Ligt adelantó al equipo piamontés poco antes del descanso con un potente derechazo desde fuera del área (42).
Pero el Udinese fue capaz de voltear el marcador en el segundo tiempo ante una Juventus que sigue dando muestras de debilidad desde que se reanudó el 'Calcio' en junio.
Los locales empataron el partido con un cabezazo del macedonio Ilija Nestorovski (52) y se llevaron los tres puntos en el descuento con una magistral contra del senegalés Seko Fofana (90+2).
'Hemos pagado la falta de orden después de una buena primera parte', resumió el técnico juventino Maurizio Sarri.
'Quisimos ganar a toda costa, estuvimos desordenados, llevamos el partido a una deriva peligrosa y lo acabamos perdiendo en el minuto 93 porque queríamos ganarlo', añadió.
'A estas alturas de temporada es difícil, estamos todos cansados. Hemos perdido agresividad', señaló.
Pese a la derrota, la Juventus tendrá una nueva oportunidad de proclamarse campeón, el próximo domingo, en casa, frente a la Sampdoria.
Incluso lo podría lograr el sábado, viéndolo por la televisión, dependiendo de los resultados del Atalanta (2º) e Inter (3º).
Pero más allá de la anécdota del campeonato italiano, que la Juventus ganará salvo catástrofe, el equipo piamontés sigue dando muestras de que no está en su mejor momento, cuando quedan poco más de dos semanas para el trascendental duelo de vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Lyon, en el que los 'Bianconeri' deben remontar el 1-0 encajado en la ida.
5 puntos de 15 posibles
Si en la reanudación perdió en los penales la final de la Coppa frente al Nápoles, en los últimos cinco partidos de la Serie A, la Juventus ha perdido dos y empatado otros dos, sumando únicamente cinco de los 15 puntos posibles.Pese al susto inicial que dio Daniele Rugani a su propio equipo, cuando el defensor de la Juve estuvo a punto de enviar la pelota al fondo de su arco al intentar rechazar un centro rival, la Juventus fue dueña del juego en la primera parte.
Amenazó en un par de ocasiones Cristiano Ronaldo (13 y 26), que busca sumar la mayor cantidad de goles posible para acabar como máximo goleador de la Serie A y Bota de Oro europeo, y el argentino Paulo Dybala tampoco acertó a batir a su compatriota Juan Musso con un disparo desde 20 m que acertó a desviar el cotizado arquero del Udinese.
Finalmente fue De Ligt el que abrió el marcador antes de la pausa, con potente derechazo desde fuera del área (42).
El equipo turinés parecía que con ese gol podría ser ya campeón este mismo jueves, pero el Udinese quiso dar un poco de suspense al campeonato italiano y al poco de reanudarse el partido en el segundo tiempo logró el empate.
El sueco Ken Sema centró desde la izquierda y el macedonio Ilija Nestorovski, libre de marca en el segundo palo, batió al polaco Wojciech Szczesny con un cabezazo en plancha (52).
Ese gol encajado pareció afectar más de lo que debería a una Juventus que ha dado muestras de flaqueza: el equipo que entrena Maurizio Sarri no sólo se mostró incapaz de crear juego, confundiendo velocidad con precipitación, y mucho menos ocasiones de gol, sino que en algunos momentos el Udinese mostró más peligro que el líder del campeonato.
Y el equipo de Udine vio recompensado su esfuerzo en el descuento, cuando el senegalés Seko Fofana ejecutó de manera magistral una contra vertiginosa: superó en velocidad y potencia a Alex Sandro, rompió la cintura de De Ligt para entrar en el área y superó por bajo la salida de Szczesny (90+2).