TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Cada vez surgen más detalles del polémico partido en donde el Motagua derrotó 2-1 al Marathón en el Estadio Nacional, en un encuentro cargado de muchas incidencias tras el silbatazo final.
Y es que en el conjunto verdolaga ha sentado muy mal el arbitraje realizado por Melvin Matamoros, quien no sancionó un claro penal favorable para el Monstruo y pitó una falta en el área en favor de Motagua terminaría siendo el gol de la victoria.
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Luego del silbatazo final, el presidente del Marathón, Orinson Amaya, salió muy molesto y de acuerdo con el acta arbitral presentada por Matamoros el mandamás de los verdes habría intentado agredirlo en zona de camerinos.
Según el silbante, Amaya intentó ingresar al camerino para agredirlo, sin embargo, esta acción fue evitada por los jugadores del Marathón.
“Una vez finalizado el juego, estando en el camerino de árbitros, el directivo del equipo Marathón, el señor Orinson Amaya, intentó ingresar al camerino para agredirme, pero no lo logró, porque los jugadores y cuerpo técnico lo evitaron y de igual manera empleó lenguaje ofensivo hacia mi persona”, señala el acta arbitral.
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Asimismo, el informe señala las dos expulsiones a jugadores de Marathón, Luis Garrido y Santiago Córdoba, el primero por una violenta infracción y el segundo por usar lenguaje ofensivo contra el cuerpo arbitral.
Luego del polémico partido, el Marathón anunció que denunciará a Melvin Matamoros por racismo y trato homofóbico hacia sus jugadores y cuerpo técnico.
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