SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Alexis Reyes, cafetalero de la aldea El Naranjito, en la cordillera de El Merendón, afirma que él junto a decenas de pequeños productores solo vive de esperanzas. El cafetalero explica que ha sido un mal año para los productores en todo Honduras, por los precios bajos del grano aromático en el mercado internacional.
El viernes, el saco de 46 kilos café cerró a 99.70 dólares (L 2,394) en la bolsa de Nueva York, cuando hace un año en esta misma fecha el precio era de 140.1 dólares (L 3,365).
Reyes ha logrado cosechar, en años anteriores, hasta 703 quintales de grano oro, pero este año solo cosechó 400 quintales, debido a que “no hay presupuesto para abonar la tierra”. El pequeño productor contó que su familia se ha visto obligada a diversificar los cultivos para salir adelante.
Reyes ve muy difícil que el apoyo financiero recién aprobado por el Congreso Nacional, impulsado por el Poder Ejecutivo y el Instituto Hondureño del Café (Ihcafé), llegue a los pequeños productores. Iván Fajardo, otro cafetalero de El Merendón, desea que la ayuda pueda verdaderamente llegar a los que la necesitan.
A trece días de que se cierre la cosecha de café 2017-2018, Honduras no logrará superar las cifras de la temporada anterior. A partir de cifras del Ihacafé, el volumen exportado a la fecha es de 9,175,549 quintales de 46 kilogramos por un valor de 1,114 millones de dólares (L 26,758 millones).
Yeny Bustamante, jefa de Comercialización del Ihcafé, dice que el registro de ventas es de 9.5 millones de quintales; no obstante, la proyección de exportación de la presente cosecha es de 9.3 millones de sacos por un valor aproximado de 1,200 millones de dólares (L 28,824 millones).