TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La camaricultura hondureña transita por una situación compleja por una serie de eventos internos y externos.
Entre los factores que impactan en el sector acuícola nacional destacan la sobreoferta de camarón ecuatoriano en el mundo, los bajos precios internacionales, el rompimiento de relaciones diplomáticas con Taiwán y el reciente bloqueo de México.
Cifras preliminares de la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah) indican que la ruptura de las relaciones con Taiwán significará este año 15 millones de dólares por el 20% de impuesto que se paga por ingresar a ese país asiático. Esa cifra se fundamenta en una proyección de exportación de 24 millones de libras.
Honduras perdió el 5 de diciembre de 2023 las preferencias arancelarias de cero por ciento para exportar a Taiwán después que el gobierno de la presidenta Xiomara Castro anunciara en marzo del año pasado el rompimiento de relaciones diplomáticas con ese país.
Taiwán se mantiene desde 2022 como el primer mercado para el camarón cultivado en Choluteca y Valle.
Sin embargo, con el rompimiento de las relaciones diplomáticas y la sobreoferta mundial de camarón, los productores hondureños han sido afectados.
Un ejemplo de lo anterior es que antes del 5 de diciembre de 2023, el precio promedio por libra de camarón exportado a Taiwán era de 3.10 dólares, la que se redujo a $2.50 al eliminarse el Tratado de Libre Comercio (TLC). La presentación comercializada en ese país asiático es entero.
Se estima que el impuesto oscila entre 50 y 60 centavos de dólar por libra.
Pese a la ruptura de las relaciones con Taiwán, ese país se mantuvo en 2023 como el primer destino para el camarón hondureño al exportarse 24.3 millones de libras (30.8% de los 78.9 millones de libras) por $74.9 millones. Esas cifras son menores a las de 2022 cuando se exportaron 29.1 millones de libras por $105.8 millones, a un precio promedio de 3.65 dólares la libra.
