BOGOTÁ, COLOMBIA.- El presidente de Davivienda, Javier Suárez, afirma que la innovación está en el ADN de los colaboradores. Esta cultura se traduce en que el 90% de los 22,7 millones de clientes del banco son digitales.
Con una mirada hacia adelante y bajo el lema “Un futuro emocionante”, la empresa regional del Grupo Bolívar, ofreció a un grupo de periodistas de Costa Rica, El Salvador y Honduras, un recorrido al interior de los valores y su propuesta de transformación, en el marco de su 50 aniversario.
Durante el ciclo de conferencias, que tuvo lugar en el Domo, como bautizó Davivienda a su centro de innovación ubicado en Bogotá, Colombia, y en el que se habló de nuevas tecnologías, de StartUps, de Inteligencia Artificial y de patentes, entre otros, los expositores reafirmaron los principios de la empresa, que tiene como base el respeto, la equidad y una oferta de valor con tres atributos: confiable, amigable y sencilla.
“No somos solo un banco”, dijo Suárez en su disertación, en la que destacó que a las 18 mil personas que forman parte de Davivienda, de los cuales 61% son mujeres y 39% hombres, les apasiona aprender, co-crear y mantienen vivo el lema de ser ambidiestros: es decir, con una cultura digital, pero sin perder la cercanía con el cliente.
Pero Suárez va más allá, para él no se trata solo de 18 mil empleados, sino de 53 mil sumadas sus familias, quienes viven a diario la esencia de la cultura organizacional con un modelo de gestión basado en el cliente.
Davivienda no tiene puesta la mirada en estos 50 años, sino en el futuro, creando y adaptándose a las nuevas tecnologías para construir ofertas de valor que atiendan las necesidades financieras de sus clientes.
El reto en Honduras
“En estos 50 años lo que ha hecho el grupo es transformarse. Nacimos en el año 72 y nos hemos vuelto un grupo regional a través del tiempo, haciendo algunas adquisiciones, entre ellas las operaciones que adquirimos del grupo HSBC en 2012 y que nos ha permitido estar en la región desde hace 11 años”, explicó Reinaldo Romero Gómez, vicepresidente ejecutivo internacional de Davivienda.
Según Romero Gómez, en esa transformación se han enfocado en la transformación digital, “poder utilizar la tecnología al servicio de nuestros clientes, entregando la mejor oferta de valor posible, pero sin perder los atributos de seguridad y confiabilidad en nuestra entidad”.
En Honduras el banco que ya cumple 10 años, espera seguir creciendo y adaptando su oferta a las necesidades de los hondureños. “Hay algunos retos, entre ellos la adopción digital del país, hacerles sentir que estas herramientas son seguras, que pueden ser el cambio de ir a la oficina y hacer una fila larga, a saber, que través del teléfono móvil puede tener el acceso de un banco a su servicio”.
El domo de la innovación
Otra de las fortalezas de la propuesta de transformación es la adaptabilidad, que lleva a hacerle más sencillos los procesos al cliente, espacios laborales diversos y equitativos y, entendiendo las necesidades de cada mercado.
El modelo de innovación de la empresa se basa en diversificación e inversión, alianzas estratégicas, desarrollo de StartUps y la integración de una organización dispuesta a aprender. Trabajan con las universidades y la academia, patentan sus proyectos y premian la innovación, entre otros.
Con los atributos como pilar, aplicados de manera transversal dentro de la organización, Óscar Rodríguez, vicepresidente de innovación de Davivienda, explica que todo ocurre en el Domo, una estructura circular ubicada en el último piso del edificio principal del Davivienda en Bogotá.
“Quisimos simbolizar lo que era nuestro observatorio con la mirada al mundo y entonces se diseñó este Domo con esa estrella que es la misma estrella que simboliza nuestros atributos y valores. Decidimos que centros de innovación hay muchos en el mundo, pero domos solo hay uno”.
La jornada concluyó con una experta en manejo de patentes, el impacto en la Inteligencia Artificial en la vida diaria, tres emprendedoras compartieron sus experiencias exitosas de innovación y se presentaron tres aplicaciones implementadas por el banco, que son ejemplo de éxito en Centroamérica (El Salvador, Honduras y Costa Rica).
