TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los productores de maíz tuvieron este año una de las mejores cosechas, pero ahora el problema es que no hay mercado para comercializar su producto.
En el ciclo de primera se cosecharon más de 10 millones de quintales, la mayoría de este producto tiene como destino las procesadoras de harina y de concentrado.
VEA: Alistan fondo de liquidez para aliviar deuda de las mipymes
José Maradiaga, miembro de la Asociación Nacional de Agricultores y Productores de Granos Básicos (Prograno), denunció a EL HERALDO que las empresas procesadoras de harina sí compran parte del maíz blanco, el problema es con la industria de balanceado. Los procesadores de concentrado animal no han querido colaborar con los productores nacionales asegurando que son parte del Tratado de Libre Comercio (TLC) y pueden importar el grano a bajo costo.
L 804 es el preciode la carga de maíz blanco en Honduras, según los productores. |
Datos del Banco Central de Honduras y de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) evidencian que en 2019 se importaron 10.5 millones de quintales de maíz amarillo para la industria del balanceado.
El costo de esta importación fue de 94.6 millones de dólares, es decir, cada quintal importado costó 236 lempiras, mientras que en el mercado nacional ronda 380 lempiras.
ADEMÁS: Honduras pagará el 46% de la deuda externa con más deuda
Compromiso
“En otros países no suceden esas situaciones, allá les importa más su producto nacional, si no hay capacidad en lo nacional se procede a las importaciones, pero aquí no, aquí hacen lo contrario y dejan a la mano de Dios el producto que no puede ser colocado en la agroindustria”, declaró Maradiaga.
Mauricio Guevara, titular de la SAG, en comunicación con EL HERALDO, justificó que esto no es nuevo, ya se venía trabajando en dos mesas, una para el tema de harinas y otro para
alimentos balanceados.
LE PUEDE INTERESAR: Honduras: Productores garantizan cosecha de granos básicos
La de alimentos balanceados quedó excluida porque estas empresas son parte del TLC, y ya no tienen que pagar impuesto de importación, debido a que está en cero ese compromiso y reciben mejores beneficios de EE UU.
El funcionario indicó que hay alrededor de seis pequeñas empresas de balanceados que sí les están comprando a ciertos productores, pero se están buscando alternativas de valor agregado como procesarlos en hojuelas de maíz, realizar ensilaje o buscar otros cultivos para las áreas de producción.