Tegucigalpa, Honduras.- Dos años cumplió el Programa Nacional para la Reducción de Pérdidas (PNRP) y la meta inicial de instalación de 454,060 medidores siguió siendo parte de sus incumplimientos.
EL HERALDO conoció con base a datos oficiales que en el segundo aniversario del plan de rescate de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) se contabilizaban 446,460 contadores eléctricos colocados a octubre de 2024 equivalentes al 98.3% de lo proyectado para el primer período de 12 meses.
Si bien para finales de noviembre se pudo haber alcanzado el total de esta acción de medida directa tuvieron que pasar más de dos años para que el PNRP lograra lo planteado durante su lanzamiento -en teoría y no práctica- que aconteció el 5 de julio de 2022.
Luego de 143 días, el 25 de noviembre de ese mismo año se presentó en un evento en Casa Presidencial el referido programa y 72 horas posteriores se hizo lo mismo en San Pedro Sula en donde inició formalmente operaciones.
No solo retrasos en la adquisición de equipo al igual que insumos ha experimentado el PNRP desde el principio, sino también ha estado rodeado de polémicas al tener coordinadores con un salario de 100,000 lempiras mensuales, una planilla de casi 2,000 empleados hasta cambiar del 8% al 4% el objetivo de disminución de perjuicios técnicos y no técnicos de la estatal en 365 días.
Para compras y adquisiciones en distribución fue definido un presupuesto de 3,341.4 millones de lempiras, de los que el 13.60% (L454.5 millones) se destinarían como inversión para obtener medidores convencionales y 541.5 millones de lempiras para conseguir equipo de medición y control remoto a través de la tecnología AMI centralizada.
Un total de 746,613 instalaciones eléctricas han sido revisadas a la fecha por el personal que labora en el plan de rescate de la ENEE que ha corregido 571,033 anomalías y llevado a cabo la desconexión de 208,702 derivaciones de hurto de energía.
Reducción a medias
Pese a que las pérdidas operativas de la ENEE se han mantenido al alza con el PNRP vigente, estos perjuicios lograron registrar dos descensos durante el 2024.
EL HERALDO informó que durante enero pasado los perjuicios del organismo autónomo se situaron en 39.49% que representó 1.72 puntos porcentuales más que al cierre de 2023 cuando se reportó el 37.77%.
Mientras que 34.42% sumaron las pérdidas para febrero, reflejando un 5.07% de disminución.
Al concluir el contrato con la Empresa Energía Honduras (EEH), la ENEE asumió las funciones de gestión comercial, lectura, facturación del servicio de distribución, incluso la reducción de pérdidas, por lo que para agosto de este año bajaron al 37.16% que implicaron 16,575.7 millones de lempiras frente al 39.33% (L16,282.6 millones) que alcanzaron en el mismo período de 2023.
Del 37.01% fueron los perjuicios energéticos durante septiembre que se traducen en 18,915.9 millones de lempiras y significaron un incremento de L2,340.2 millones.
Desde la estatal eléctrica se argumenta que “para finales de octubre el PNRP logró la reducción de 2.6% de pérdidas, recuperando 1,430 millones de lempiras”.
Sin embargo, tampoco se cumplió con el 3% de disminución en el indicador interanual de parte del plan de rescate que persiguen la misma finalidad con la Unidad Técnica de Control de Distribución (UTCD).
No comprado
“La cantidad de personas fue muy grande que contrataron (para el plan de rescate de la ENEE), pero lo más problemático no fue eso, sino que no estaba comprado el equipo para que estas cuadrillas pudieran funcionar completamente y requerían entrenamiento porque era gente sin experiencia en su mayoría y eso toma entre seis meses a un año”, aseguró a este rotativo Salomón Ordóñez, quien funge como directivo y asesor del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).
A criterio del presidente del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), Miguel Aguilar, se requiere multiplicar esfuerzos en campo para reducir las pérdidas de la estatal, pero también hay que supervisar el procedimiento de la instalación de medidores para que no sean trastocados.
“Pese que hay esfuerzos notables en atención eléctrica e instalación y revisión de medidores corrigiendo las anomalías de hurtos, falta generar y aplicar políticas públicas para una mejor operatividad”, se subraya en el informe de Riesgos Fiscales que se adjuntó en la documentación del proyecto del Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República para el ejercicio fiscal 2025.
