La catracha, que demostró su talento durante toda la competencia, en la que nunca estuvo en peligro de eliminación, obtuvo el apoyo total del público con su carisma.
Tras recibir la corona de manos de la anterior reina Migdelis Castellanos, Sirey expresó con lágrimas en sus ojos y aún shock por la noticia: 'Esta corona es para Honduras'.
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Agregó: 'Mami, papi, para ustedes es la honra'. La hondureña lloraba de la emoción antes de caminar por el escenario con un arreglo de flores en su regazo y la corona de NBL, además ondeaba el pabellón nacional tras llenar de orgullo a los hondureños.
Tras ganar el concurso, Sirey obtuvo un contrato con Univisión, además de un curso en mejoramiento que recibirá en Televisa.
'Muchas gracias, la primera corona para Honduras. Muchas gracias a los que me han apoyado', agregó la catracha visiblemente emocionada.
Aquí sus emotivas declaraciones:
