Demián Bichir, el actor mexicano del momento, afronta ilusionado el rodaje de 'Refugio', su ópera prima como director y un salto en su aplaudida carrera con la que espera hacerse lugar en Hollywood, donde los artistas latinos son 'muy necesarios'.
Un día después de terminar el rodaje de su film en tierras mexicanas, el nominado al Óscar como mejor actor por 'A better life' (2012) recibió el sábado a la AFP en su casa del sur de la capital, donde habló de 'Refugio' pero también de su participación en la serie 'The Bridge' (Canal FX) y del buen momento del cine de México sin escatimar críticas hacia sus políticos.
Recostado en su sofá, Bichir respira aliviado por haber concluido exitosamente las tres primeras semanas del rodaje, que continuará en Nueva Orleans (sur de Estados Unidos). Asegura que está sufriendo su nueva faceta detrás de las cámaras, aunque está gratamente sorprendido de su aplomo.
'Yo pensé que me iba a estar haciendo pipí. Pensé que iba a ser mucho más duro el proceso en cuanto a nervios y demás', confiesa antes de añadir: '¿Será que con la edad se hace uno más cínico?'.
A sus 50 años, este hijo de una saga de intérpretes mexicanos está convencido de que 'en todos los actores hay un director por ahí dormido, escondido', y pese a que 'Refugio' salió de una apuesta con su amigo y productor Jorge Sigler, confiesa que tenía esta inquietud 'muy viva'.
La película narra la historia de un niño que crece en un circo de México y se convierte en hombre a través de la búsqueda del amor y de su propia introspección durante un viaje azaroso que lo llevará a Estados Unidos.
Rodada en castellano y en inglés 'con mucho más corazón que recursos', la película cuenta con un elenco eminentemente mexicano donde destacan figuras como Ana Claudia Talancón, el propio Bichir o su papá Alejandro, pero también actores internacionales como la estadounidense Eva Longoria o la pareja del director, la canadiense Stefanie Sherk.
'Parte de lo que queremos con 'Refugio' es que se abra una brecha para seguir haciendo más historias, para conquistar algún tipo de credibilidad y poder poner en la mesa diferentes no sólo estudios, sino también nombres', señala el actor, que vive desde hace años entre Los Ángeles y México.
Poder latino en Hollywood
'Creo que los actores llamémosle latinos en Hollywood somos muy necesarios, pero lo más interesante va a ser cuando nosotros generemos nuestros propios proyectos', afirma el actor de 'Sexo, pudor y lágrimas' (Antonio Serrano), 'Che' (Steven Soderbergh) y 'Savages' (Oliver Stone).
De hecho, Bichir asegura que la creciente presencia de hispanoamericanos en la llamada meca del cine no tiene mucho que ver con 'el sueño hollywoodiense'.
'Corresponde más a un espíritu aventurero. A mí, abrirme un camino en Estados Unidos me costó mucho trabajo y estoy donde estoy por terco, no por talentoso', afirma.
Sin embargo, su nominación al Óscar y a premios del Sindicato de Actores de Estados Unidos o a los Independent Spirit Awards no dicen lo mismo, ni tampoco su actual protagonismo con la alemana Diane Kruger en 'The Bridge', una de las nuevas series estadounidenses que retrata la violencia de la frontera entre El Paso (Texas, sur) y la mexicana Ciudad Juárez (Chihuahua, norte).
México violento, política desastrosa
'El gran problema, ahora estresante en México, es la violencia' que ha causado decenas de miles de muertos en los últimos años, afirma con preocupación Bichir, que en 'The Bridge' encarna a un policía de Chihuahua que tiene que lidiar con narcos y traficantes de migrantes indocumentados.
'El problema es esa estupidez de guerra (contra los cárteles) que entabló el expresidente del país (Felipe Calderón, 2006-2012), que ahora da clases en Harvard. ¡Imagínate, qué maravilla de prestigio para esa institución!', manifiesta el intérprete.
Sobre el nuevo gobierno de Enrique Peña Nieto, Bichir cree que el PRI (Partido Revolucionario Institucional) 'va dispuesto a lo que sea con tal de conservar el poder que perdieron' los últimos 12 años y que los políticos van a seguir dando material a los artistas, como se ha visto en la nueva hornada de 'grandes cineastas mexicanos muy jóvenes' que reflejan con dureza la realidad mexicana llevándose premios de prestigiosos festivales internacionales.
'Tenemos muy pocas buenas noticias que celebrar. La clase política logra constantemente desprestigiar a México y hay un montón de gente que estamos tapando estos hoyos constantemente. Es dura la tarea porque es un desastre lo que estos cabrones hacen, pero lo hacemos con amor y con dedicación', sentencia.