TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En una noche en la que el calor de verano se funde con la promesa de un momento inolvidable para los amantes de la música pop, Nick Carter, el icónico vocalista de los Backstreet Boys hipnotizó en su concierto en Honduras.
Con un espectáculo cargado de energía, recuerdos y una vibrante conexión con el público, el rubio más aclamado de los años 90 se robó los suspiros de las hondureñas con su talento artístico y memorables coreografías desde el estacionamiento de Bazar del Sábado.
“Bienvenidos al Who I Am Tour”, inició diciendo el artista quien presentó un repertorio lleno de éxitos, pues además de interpretar exquisitamente sus sencillos en solitario incluyó algunas de las canciones de gloria de las bandas más populares de todos los tiempos además de los Backstreet Boys.
Larger Than Life fue la elegida para abrir el show de Carter quien de inicio a fin mantuvo una completa compenetración con su público en su debut por las tierras catrachas.
Una ola de emoción se apoderó de los fanáticos cuando timbraron los acordes iniciales de Everybody Wants To Rule The World que en fusión con el carismático estadounidense desató gritos ensordecedores y aplausos que resonaban por todo el lugar, sobre todo cuando incluyó las gafas negras en su elegante look de traje blanco para interpretar Sunglasses at Night.
En una segunda parte del encuentro, Carter optó por un estilo relajado para desvelar su repertorio más romántico en el que incluyó canciones como: Shape Of My Heart, As Long As You Love Me, entre otras.
Una presentación que inició a la hora pactada, como pocos artistas lo hacen, culminó con los éxitos I Want It That Way y Everybody, un himno generacional que desencadenó un frenesí colectivo, con el público saltando y cantando al unísono mientras Carter recordaba las emblemáticas coreografías de su eterna juventud.