Alice in Chains nunca volvió a ser la misma banda sin la voz de Layne Staley, quien con sus gritos agudos y desgarradores hasta tonos suaves armoniosos, creaba un perfecto dominio del falsete.
La capacidad de Layne de demostrar emociones y sentimientos de angustia, dolor e ira en sus presentaciones fue siempre motivo de reconocimiento entre sus fans.
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Un Barítono y un Tenor que demuestra un gran trabajo vocal de tres octavas y media (en sus mejores días).
Así fue Alice in Chains, banda que se formó en 1987, de la mano de Layne Staley, Jerry Cantrell, Sean Kinney, Mike Inez y Mike Starr.
Facelift, Dirt y Alice in Chains fueron algunas de las producciones discográficas que marcó a la agrupación al estrellato; de las que sobresalen rolas como Man in the Box, No excuses, Rooster, Nutshell. Uno de los mejores momentos de la banda fue el MTV Unplugged, en el año 1993.
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Pero una lamentable noticia acabó con la luz de Alice in Chains. El 5 de abril del 2002, Layne fue encontrado muerto en su casa. Habían pasado dos semanas desde que se había inyectado una dosis letal de 'Speedball' (heroína y cocaína). Tenía tan solo 34 años.