TEGUCIGALPA; HONDURAS. El poder femenino se respira cada vez con más fuerza en el cine hondureño. La cineasta Esther Anino es una prueba de ello al convertirse en una de las impulsoras del desarrollo de la cinematografía nacional.
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Reconocida por su trabajo como productora en el documental “Olancho” y el cortometraje “Antes de que amanezca”, además de su reciente papel como editora en el corto “Graciela”, Esther es de los nombres que resaltan en el cine hondureño.
“En los últimos años siento que hay mucha más participación de mujeres en el cine. Primero, es un rubro que finalmente está creciendo y convirtiéndose, ojalá pronto, en una industria; segundo, iniciativas como la Colectiva de Cineastas Hondureñas están haciendo un gran trabajo, dando espacio a muchas personas para que puedan desarrollarse en diferentes oficios dentro del cine. Cada vez hay más piezas cinematográficas realizadas por mujeres y esperamos que esto continúe incrementando. Sin embargo, hay brechas que aún deben estrecharse”, reflexiona Anino.
Sobre cómo es representada la mujer en el cine nacional, la directora afirma que es importante cuestionarnos cómo las mujeres somos representadas dentro de las historias y en esto, como sociedad y cineastas en general, tenemos mucho por avanzar para poder colaborar con nuestra sociedad, y no perpetuar a través de nuestras películas estereotipos, estigmas, comportamientos desactualizados que puedan alimentar retóricas de odio.
En cuanto al desafío de las mujeres en el arte, Esther comenta que la oportunidad de seguir avanzando hacia una paridad de género y justicia social es vigente. “En el cine hay patrones que se repiten al igual que en la mayoría de los rubros y es que ciertos puestos, como los técnicos, son ocupados predominantemente por hombres, también se repiten temas sobre distintos tipos de violencia que procuran espacios inseguros y aumenta el desafío de persistir en una carrera que es vocacional y que requiere muchos sacrificios”, señala.
Antes de finalizar 2022, Esther tuvo la oportunidad de representar a Honduras en el Festival Internacional de Cine Documental de Ámsterdam, Países Bajos, más conocido por sus siglas en inglés IDFA, es el mayor festival de cine documental del mundo.
“Estar en IDFA me permitió entrar en contacto con otros festivales y fondos que son indispensables para el crecimiento de nuestras películas en Tercer Piso (su casa productora). También poder participar en talleres colaborativos con tecnología de punta, espacios de conversación con productores y directores con larga experiencia y provenientes de todo el mundo”.
