En una emotiva ceremonia religiosa llevada a cabo en la iglesia San Miguel de Tegucigalpa, los novios Katherine Velásquez y José Miguel Coello se dieron el 'sí, acepto' y unieron sus vidas en sagrado matrimonio.
El reloj marcaba las ocho de la noche, todos estaban a la espera de la novia, la iglesia lucía una decoración con rosas blancas, era el escenario perfecto para ser testigo de una verdadera historia de amor.
La 'Marcha nupcial' sonó, el novio parado frente al altar esperaba a su futura esposa, el cortejo comenzó a ingresar, todas las damas iban vestidas de azul. Amigos, familiares y demás invitados esperaban ansiosos el ingreso de la novia.
Todos se pusieron de pie, Katherine hizo su entrada del brazo de su padre, llevaba un hermoso vestido blanco en corte princesa y un delicado velo que denotaba su pureza.
Posteriormente, la ceremonia dio inicio, el padre comenzó a oficiar la misa y, luego de unos minutos, el novio pidió un momento pues tenía una sorpresa para la novia.
José Miguel Coello escribió unas bellas palabras que rememoraban detalles importantes de su noviazgo, ambos terminaron con lágrimas en su rostros. Fue uno de los momentos más emotivos de la noche.
Luego de eso, los esposos se dirigieron al Hotel Marriott, donde pasarían una agradable velada y degustarían de exquisitos platillos, elegidos especialmente para la ocasión.
El salón, acreedor de una imponente decoración, donde las rosas blancas y fina cristalería fueron el complemento perfecto para esta historia de cuento de hadas, fue testigo de la felicidad que derrochaba la pareja.
Los esposos bailaron el vals y dieron por inaugurada la fiesta.
Sin embargo, al filo de la medianoche, una sorpresa más les esperaba a los recién casados, al salón ingresó una batucada que puso a bailar a la pareja y a los demás invitados al compás de los tambores.
La pareja disfrutó de su luna de miel en una paradisíaca playa hondureña.
