KAZAN, RUSIA
Francia es la selección del mundial perseguida por la tecnología. En su momento estrenó el Ojo de Halcón y ahora el VAR.
El videoarbitraje (VAR), una de las estrellas de Rusia-2018, entró en escena recién el quinto partido del torneo, este sábado durante el choque que inauguró el Grupo C.
El árbitro uruguayo Andrés Cunha recurrió al sistema para otorgar un penal en favor de los Bleus, que cambió por gol Antoine Griezmann para poner el transitorio 1-0, a los 58 minutos.
Por la utilización del VAR pasará a la historia el Francia-Australia, porque el juego recién se puso algo interesante tras el gol del delantero del Atlético de Madrid, quien también había sido víctima del penal que llevó al colegiado a verificar la acción.
Luego, se utilizó la tecnolgía de la línea del gol cuando Paul Pogba consiguió el segundo gol de los islandeses. El balón se estrelló en el larguero, y aunque la pelota picó dentro evidente a la vista, el sistema de chip en el balón y la línea de activo para el registro.
A esta selección francesa como que la tecnología la persigue, porque en 2014 ante Honduras, un gol de Karim Benzema le dio vida al Ojo de Halcón, que era lo último en los campos de juego hace cuatro años.
Francia es la selección del mundial perseguida por la tecnología. En su momento estrenó el Ojo de Halcón y ahora el VAR.
El videoarbitraje (VAR), una de las estrellas de Rusia-2018, entró en escena recién el quinto partido del torneo, este sábado durante el choque que inauguró el Grupo C.
El árbitro uruguayo Andrés Cunha recurrió al sistema para otorgar un penal en favor de los Bleus, que cambió por gol Antoine Griezmann para poner el transitorio 1-0, a los 58 minutos.
Por la utilización del VAR pasará a la historia el Francia-Australia, porque el juego recién se puso algo interesante tras el gol del delantero del Atlético de Madrid, quien también había sido víctima del penal que llevó al colegiado a verificar la acción.
Luego, se utilizó la tecnolgía de la línea del gol cuando Paul Pogba consiguió el segundo gol de los islandeses. El balón se estrelló en el larguero, y aunque la pelota picó dentro evidente a la vista, el sistema de chip en el balón y la línea de activo para el registro.
A esta selección francesa como que la tecnología la persigue, porque en 2014 ante Honduras, un gol de Karim Benzema le dio vida al Ojo de Halcón, que era lo último en los campos de juego hace cuatro años.