martes , 25 marzo 2025
Sin hogar, sin empleo y sin ayuda: una familia que sufre la crisis de Eta y Iota (FOTOS)
- Fany Mejía y sus hijos vivían en un humilde hogar construido con base en su trabajo y sacrificio como madre soltera, pero la tragedia llegó a sus vidas tras el paso de los devastadores huracanes. Su conmocionante historia en imágenes. Fotos: Emilio Flores/EL HERALDO. 16/12/2020 - 12:121 / 20
- Así era la humilde vivienda que Fany Mejía compartía junto a sus pequeños hijos, en el barrio El Edén, ubicado en Tegucigalpa, capital de Honduras. 16/12/2020 - 12:122 / 20
- Ahí habían crecido los pequeños, hasta que las lluvias dejadas por Eta y Iota les arrebataron todo lo que tenían. El lugar donde estaba situada la casa de madera, se convirtió en un muro inestable y lleno de grietas. Foto: Aarón Canales/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:123 / 20
- Por tal razón, Fany decidió demoler la casa para evitar una tragedia mayor, ya que al derrumbarse podía caer sobre la vivienda de su madre, ubicada unos metros abajo, en el mismo terreno. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:124 / 20
- Tras el hundimiento de su hogar, las autoridades llegaron a evacuarlos porque ese sector es una zona de alto riesgo. Fany, sus hijos, sus hermanas y sus sobrinos fueron instalados de forma temporal en los gimnasios del complejo deportivo de la Villa Olímpica. Foto: Aarón Canales/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:125 / 20
- Tras varios días albergada, sin posibilidades de moverse a ningún sitio, ante la falta de dinero y de seguridad para dejar a sus hijos en algún lugar, Fany Mejía perdió su empleo como niñera, pues sus jefes no pudieron esperar a que saliera del albergue. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:126 / 20
- Y como si eso fuera poco, tuvo que salir del albergue de manera eventual, pues las condiciones en las que eran atendidos desencadenaron enfermedades en sus hijos. La capitalina asegura que la comida en ocasiones llegaba en mal estado y sumado a eso, algunas otras personas damnificadas se quedaban con la mayor parte. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:127 / 20
- Al salir del albergue, regresó al terreno donde vivían, llena de esperanza de ver otra vez su casa en pie y tener su hogar como antes de los huracanes, pero se vio forzada a derribar lo que quedaba de él, por la misma vulnerabilidad de la zona. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:128 / 20
- “Mi casita la construí con puro esfuerzo en mis trabajos, yo soy madre soltera y he trabajado duro por sacar a mis hijos adelante, para darles el pan de cada día y tengan un lugar donde vivan bien”, manifestó muy conmovida. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:129 / 20
- El estar parada sobre el lugar donde existió su vivienda llenó a Fany de muchos recuerdos. Buenos recuerdos, como cuando vivía tranquila con sus niños, hasta el día en que según narra, casi mueren soterrados por el hundimiento del terreno. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1210 / 20
- En la parcela de tierra donde vivía Fany, también tenían su domicilio su madre y varios de sus hermanos, quienes también sufrieron daños por las tormentas. Ahora, su hermano levanta los muros que se cayeron para evitar que las piedras ocasionen más desastre. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1211 / 20
- La tragedia no es la primera que les ocurre, pues en años anteriores también fueron dañados por las tormentas en el mismo terreno inestable. Ahora, la familia Mejía nuevamente perdió su hogar, por lo que la historia de superación les duró solo 12 años. Foto: Aarón Canales/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1212 / 20
- Ahora, sin un techo y sin empleo para poder comprar la leche y pañales para sus niños de 1 y 3 años, Fany tuvo que optar por trabajar en la recicladora de unos conocidos y así poder obtener algo de dinero y subsistir. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1213 / 20
- Su jornada de trabajo en la chatarrera consta de 10 horas y lo que gana por día son solo 150 lempiras, que apenas alcanzan para comprar lo realmente necesario como la comida. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1214 / 20
- Además, debe llevar a sus hijos a su lugar de trabajo porque no tiene quién pueda cuidar de ellos mientras labora, tampoco puede pagar a una persona que se encargue de ellos porque el sueldo no le ajusta. Por otro lado sus familiares no pueden apoyarla porque están refugiados en distintos lugares en la capital y cada quien tiene su familia y niños. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1215 / 20
- El trabajo que desempeña en la chatarrera es recibir botellas y otros materiales que otras personas recolectan en la calle y se las van a vender. Los dueños del lugar las revenden y así consiguen el dinero con el que luego le pagarán a ella. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1216 / 20
- Fany lucha para superarse con una gran motivación: sus hijos. “Así como sucedió en 2008 que perdimos todo, si pudimos levantarnos, ahora lo haremos de la misma manera, solo que la situación ahora está más difícil por la pandemia, pero sé que Dios nos ayudará”, dijo ilusionada. 16/12/2020 - 12:1217 / 20
- En su lucha por sobrevivir, la joven intenta cuidar a sus niños al tiempo que realiza su labor de reciclaje y aunque cumplir con ambas funciones es realmente agotador, su fuerza la encuentra en ellos mismos. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1218 / 20
- La esperanza de la familia Mejía es levantar su casa, tener de nuevo un hogar y superar ese episodio amargo vivido en el 2020. “La situación es difícil, pero yo sé que yo como madre soltera puedo sacar adelante a mis hijos, así como lo hizo mi mamá con nosotros”, concluyó. 16/12/2020 - 12:1219 / 20
- Si usted desea ayudar a esta compatriota puede comunicarse al teléfono: 8875-4825 o acudir con donativos a las instalaciones de Diario EL HERALDO en la colonia Loarque de Tegucigalpa. Foto: Emilio Flores/ EL HERALDO 16/12/2020 - 12:1220 / 20
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